En un cuarto oscuro, con una tenue, casi extinta luz roja que ilumina únicamente la entrada, se llevó a cabo hoy la inauguración de la exposición “El mapa y el territorio”, que es una instalación que simula el funcionamiento de percepción visual a cargo del binomio creativo “Dear”, proyecto de los franceses Delphine Passot y Arnaud Zein.

 

Dentro de la sala, en el Museo de la Ciudad de México, Arnaud explicó que la exhibición muestra el funcionamiento de una cámara oscura a partir del entendimiento del instrumento como una forma de abstracción del ojo humano.

 

Recordó que aquél fue una invención que modificó los paradigmas que servían para interpretar la realidad.

 

Sobre la relación entre la cámara oscura y la instalación, expuso que la esencia del proyecto es exponer cómo un instrumento para representar la realidad conlleva una carga reflexiva sobre la visión.

 

La apreciación, la abstracción y la representación se relacionan con lo que refleja la vista, así como la realidad que se proyecta a partir de la imagen, es por ello que dicho aparato sirvió para científicos y posteriormente artistas.

 

De esta forma, la sala del Clauselito se ofrece como una máquina para percibir la realidad en la que las paredes, el techo y el piso están pintados de negro, por lo que no se ve nada. Sin embargo, fue colocado un “pinehole”, un hueco minúsculo en la pared del fondo, del que emana una proyección, que se describe como banal.

 

Desde este hueco se observa una proyección en el que se reconocen los edificios detrás del museo, nubes, tinacos o aviones, entre otros objetos de las calles, también aparecen imágenes fantasmas, espectros de la realidad fragmentada o refractada.

 

Arnaud opinó que la exposición se ve desde una perspectiva filosófica, pues se trata de una representación que altera y pinta la realidad; se trata, pues, de una descomposición de elementos cotidianos, como si únicamente la representación pudiera volver un paisaje banal en otro, que se puede imprimir sobre una tarjeta postal, un mapa e incluso un territorio.

 

El proyecto está hecho con un soporte en el cual la realidad es ella misma, haciendo del espacio de representación la vía de la representación.

 

Cabe anotar que en uno de los muros pintados de negro se muestra el funcionamiento de la cámara, así como la similitud con el proceso que lleva a cabo el ojo humano.(Notimex)