El Festival de Cortometrajes de Miami celebrará una década de exhibición de cintas de todas partes del mundo a partir del próximo 12 de noviembre, cuando comience una edición en que se rendirá un tributo especial a los trabajos de México y Venezuela.

 

Para su fundador y director ejecutivo, William Vela, durante esta primera década de existencia el festival ha servido como espacio reservado para un “género no tan explotado”, así como carta de presentación para directores de todas partes del mundo.

“Antes se tenía una perspectiva diferente a cerca de una película cortometraje y se veía simplemente como comienzo para un estudiante. Hoy en día se ha abierto un mercado de festivales y canales de distribución que busca ese contenido”, dijo en una entrevista con Efe.
Prueba de ello, han sido los casi nueve mil cortos que se han presentado en el festival, entre los que ha habido incluso algunos con un presupuesto de millones de dólares en producción y otros que hasta han ganado un Óscar.

 

Así, y con motivo de la celebración de una década de festival, este año se volverán a proyectar en el Teatro Colony de Miami Beach algunos de los cortos “que marcaron una pauta”.

 

“Entre ellos está ‘God of Love’ que fue la ganadora de los Óscar este año”, mencionó Vela sobre el corto estadounidense dirigido por Luke Matheny y que fue exhibido en el festival en 2010.

 

También se destacó “Frankie” (Irlanda) ganadora en 2008 de la Berlinale y del Festival de Cortometrajes en Miami, “Los gritones” (España) y “Grisen” (Dinamarca).

 

En esta edición sus organizadores han decidido, además, rendir un tributo especial a los directores de México y Venezuela, países que “se han destacado por mandar buen material”, explicó Vela.

 

Los filmes mexicanos que se presentarán son “Epílogo” de Carlos Correa Reynoso, donde se narra la historia de Manuel, quien tiene que adaptarse y entrar en un estado de meditación por un suceso que cambia su vida rutinaria.

 

También se proyectarán “Corazón de perro” de Ismael Nava, “Los días en verano” de Aina Calleja, “La Mina de oro” de Jacques Bonnavent, e “Ivan” de Marcos Villaseñor.

 

Por parte de Venezuela se podrá ver “Caracoles y cascabeles”, dirigida por Gustavo Rondón y que relata el drama de Ramiro, un pescador que desea enseñar a pescar a su hijo pero este prefiere colectar caracoles.

 

Otros cortos de Venezuela serán “Centrípeta” de Alex Méndez y “La Soja” de Gabriel Eduardo, que formarán parte del total de noventa proyecciones de un festival en el que se unen la narrativa, el documental, la animación, el vídeo musical y lo experimental en bloques de dos horas.

 

“Como son cortos, reunimos aquellos que tengan un denominador común y puedes ver hasta diez películas en cada tanda”, destacó Vela.

 

En las proyecciones de este año destaca el filme con una docena de premios “Paper Flower”, del director estadounidense Brent Green y sobre la historia de Asuka y Michi, dos amigas de la infancia con distintos caminos cuando se trata de encontrar el verdadero amor.

 

Otros filmes con grandes expectativas son la italiana “Il Rumore Della Neve”, la japonesa “Lunchtime”, la francesa “The Mirror” y la brasileña “A voo do aversruz”.

 

Además, el festival contará con secciones especiales para mostrar cortos de estudiantes universitarios del Sur de la Florida, de directores de Miami y con temáticas infantiles, respectivamente, al tiempo que se han organizado talleres gratuitos sobre escritura, edición y derechos de autor, entre otros. (EFE)