El sector del transporte es responsable de 18% de las emisiones de efecto invernadero a nivel nacional, no obstante existe desinterés entre los tomadores de decisiones para regular al respecto, comenta Hilda Martínez Salgado, gerente de Calidad del Aire y Cambio Climático del CTS.

 

La situación se complica por la falta de coordinación entre los gobiernos estatales y municipales, dijo la representante del Centro de Transporte Sustentable, que hace dos años propuso un plan de 10 acciones para el transporte, a fin de reducir hasta en 150 millones los 440 millones de toneladas de CO2 que se espera ese sector emita para 2030.

 

En 2009, la organización colaboró con el Banco Mundial para promover acciones que ayuden a reducir a nivel nacional las emisiones de gases de efecto invernadero por parte del transporte, sector responsable de 18% de éstas.

 

Las medidas, señaló Hilda Martínez, sólo han sido retomadas por algunos gobiernos locales, organizaciones y en el Programa Especial de Cambio Climático (PECC). En su opinión, la falta de aplicación de estas medidas obedece a barreras legales que impiden la modificación de normas, leyes y reglamentos de operación del transporte.

 

Si bien se trata de acciones que requieren una inversión considerable y sólo en algunos casos alta, el principal factor es que a los tomadores de decisiones no les interesa legislar al respecto y menos en un corto periodo de tres años. “El problema no es básicamente lo que cueste, el financiamiento es importante pero hay muchas barreras de regulación”, comenta.

 

A esto, dijo, se suma que cuando se habla de transporte se piensa en políticas para mejorar la movilidad de personas o carga en las ciudades y países, pero no en políticas para mitigar la emisión de CO2.

 

En 2009, CTS y el BM alertaron sobre el riesgo de pasar de 170 millones de toneladas de CO2 emitidas por el sector transporte a 440 millones de toneladas en 2030, a consecuencia del crecimiento exponencial de la flota de vehículos privados, de carga y colectivos.

 

Ante la previsión de que haya en el país 70 millones de vehículos en 2030,  el CTS propuso 10 medidas que incluyen promover políticas de desarrollo urbano enfocadas a concentrar, a fin de evitar traslados largos en transporte y uso de vehículo. Además, lograr que 30% del parque vehicular colectivo sea híbrido –usen tecnología eléctrica y motor a diesel-  en esa fecha.

 

Propuso además implementar transporte rápido masivo, tipo Metrobús, en ciudades con más de 750 mil habitantes y optimizar las rutas de autobuses. Asimismo, elevar a 5% el total de viajes no motorizados, mediante la promoción de las ciclovías, entre otras medidas.