El vocero del Vaticano, Federico Lombardi, dijo hoy que El Vaticano trabaja en la organización de un viaje apostólico del Papa Benedicto XVI a México y a Cuba, y la confirmación tendrá lugar en las próximas semanas.
“En días pasados los nuncios en México y Cuba fueron encargados de informar a las más altas autoridades religiosas y civiles de los dos países que el Papa está estudiando un proyecto concreto de visita a ambas naciones, respondiendo a las invitaciones recibidas”, señaló.
En declaraciones a un grupo de periodistas, Lombardi aclaró que el proyecto será profundizado en las próximas semanas y será el Papa quien tomará la decisión final, comunicándola en el modo y en los tiempos que considere más oportunos.
Advirtió que, debido a la altitud, es “poco aconsejable” que el pontífice visite la Ciudad de México y por ello la cuestión sobre las mejores alternativas para su estancia será “rápidamente afrontada”.
Añadió que el tiempo previsto para el viaje es la primavera boreal de 2012 (entre marzo y abril), por lo tanto los tiempos para la decisión definitiva sobre el programa y la preparación son “bastante cercanos”.
“La espera del pueblo mexicano es bien conocida, el Papa la tenía presente y está contento de poder finalmente responder”, indicó Lombardi.
“El Papa ha estado en Brasil, pero los países de América Latina de lengua española querían un viaje para ellos, y México es el más poblado de ellos”, agregó.
Lombardi afirmó que Cuba es otro país que deseaba mucho ver a Benedicto XVI, una nación que nunca olvidó el histórico viajo de Juan Pablo II, en el cual la Iglesia y todo el pueblo viven un periodo importante de su historia, y la visita del Papa será de “gran motivación”.
Recordó que en 2012 se cumplirá el cuarto centenario del descubrimiento de la imagen de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre, la patrona de la isla.
“Basta revisar el mapa para ver que Cuba y México se encuentran en la misma dirección respecto a Roma y, por lo tanto, es más lógico combinar estos dos países en un único viaje, antes que otros que requieran un itinerario más largo y complejo”, dijo.
“Se trata, de todas maneras, de un viaje largo que no podrá tener muchas etapas sino poquísimas, de gran valor simbólico y pastoral”, ponderó el director de la sala de prensa del Vaticano.
Asimismo destacó que, entre las finalidades del viaje, figurará la de dar seguimiento a la gran misión continental de evangelización que involucra a la Iglesia en todo el continente tras la conferencia del episcopado celebrada en Aparecida.
En esa ciudad de Brasil, en mayo de 2007, tuvo lugar la Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, un encuentro de todos los obispos de la región, los cuales acordaron una estrategia para revitalizar la práctica religiosa en sus países.
Según Lombardi, el líder católico quiere animar a toda la Iglesia en esta “gran tarea”, también en la preparación para celebrar el Año de la Fe, que comenzará en 2012 y se extenderá hasta 2013.