En Durango, a siete meses de haberse encontrado la primera de 13 fosas clandestinas en esa entidad, sólo han sido identificados 26 de los 282 cadáveres encontrados en ellas.
El pasado domingo, fue localizada la fosa número 13 en el municipio de San Juan del Río, en la cual habían sido detectados hasta ayer nueve cadáveres, y hoy martes los militares seguirán con los trabajos de excavación.
El hallazgo de esa fosa se hizo con base en una denuncia anónima atendida por personal de la Décima Zona Militar, que se trasladó al poblado Leona Vicario. Cabe apuntar que esa demarcación ubicada al noreste de la capital, no es una de las más violentas de los 39 municipios que conforman el estado.
La primera de las fosas fue encontrada en la colonia Las Fuentes, el 11 de abril del presente año, y es hasta ahora la que contenía mayor número de cadáveres, 79 en total.
De las fosas clandestinas localizadas en más de siete meses en esta entidad, ocho se ubican en Durango capital y siete están en la mancha urbana. Las cinco restantes fueron haladas en los municipios de Santiago Papasquiaro, Cuencamé, Lerdo y San Juan del Río.
Los fraccionamientos y colonias de la capital en donde han sido encontradas las áreas de entierros clandestinos son: Las Fuentes, Providencial, San Vicente, Valle del Guadiana, Puertas del Sol y Jardines de Durango, en los cuales de acuerdo con datos de incidentes violentos, se concentran la mayor parte de los secuestros de los que han sido víctimas personas que en su mayoría se mantienen en calidad de desaparecidas.
De forma particular, en el fraccionamiento residencial Jardines de Durango, se han registrado además enfrentamientos de delincuentes contra personal del Ejército y la Secretaría de Marina, tras los cuales han sido incautadas armas y vehículos de lujo.
De los 282 cadáveres encontrados, se han hecho pruebas de ADN a 240 personas, pero hasta ahora sólo se han identificado a 26 personas, todos ellos hombres.
Entre los identificados de las fosas se encuentran un policía de Sinaloa, un ex diputado local de Durango, y un ganadero.
Los peritos de la Fiscalía General Estatal han tenido problemas para lograr la identidad de los cadáveres, porque los agentes que estuvieron a cargo de las fosas con el mayor número de muertos en la capital, usaron retroexcavadoras para sacar los restos humanos, con lo cual dañaron los tejidos y fragmentaron los huesos.
Agresión a base ministerial
La sede de la Vicefiscalía de Durango fue atacada ayer a balazos y un agente estatal de investigación murió. La agresión fue atribuida a desconocidos que viajaban a bordo de dos camionetas.
A las 15:00 horas, los individuos que iban a bordo de los vehículos de color oscuro dispararon con rifles de asalto contra el personal de guardia que se encontraba en la caseta del inmueble que alberga las oficinas de la Vicefiscalía, ubicadas en el municipio de Lerdo, que forma parte de la región La Laguna, conformada por municipios de los estados de Durango y Coahuila.
En el momento del ataque, había tres agentes de la Dirección Estatal de Investigación dependientes de la Fiscalía Estatal, de los cuales uno fue acribillado, y los otros dos resultaron ilesos.
Como Juan Manuel Hernández Arias fue identificado el agente asesinado en el ataque a esa dependencia estatal.
El vocero de la Fiscalía, Raymundo Enríquez Partida, dijo que el número de elementos en las oficinas era menor al normal, por ser un día de asueto.
Tras la agresión, militares, así como policías estatales y federales, aplicaron un operativo para tratar de dar con los responsables, sin lograrse ninguna detención.
El pasado 31 de agosto, en el municipio de Lerdo, dos agentes de investigación fueron emboscados y muertos, a pocos minutos de haber salido de las instalaciones de esa Vicefiscalía.
El 27 de abril del 2007 fue atacado con ráfagas y una granada de fragmentación ese inmueble, y el saldo fue de un policía investigador muerto.