El gobierno estadunidense de Barack Obama ofreció hoy hacer “ajustes operativos” al programa de detención migratoria de “Comunidades Seguras”, que otorga poderes migratorios a policías locales, tras continuas quejas de alguaciles y activistas.
En una audiencia ante un panel del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, el director adjunto de Deportaciones del Departamento de Seguridad Interna (DHS), Gary Mead, defendió el programa pero reconoció críticas sobre su efecto en las comunidades.
“Aunque los fundamentos de Comunidades Seguras son sólidos, la Oficina de Migración y Aduanas (ICE) está consciente de las preocupaciones, incluyendo policías estatales y locales, está comprometido a hacerle ajustes operativos”, señaló.
Nueva York, Illinois y Massachusetts anunciaron su decisión de abandonar el programa, puesto en marcha por el gobierno de Obama, bajo el argumento de que ha sido discriminatorio y contraproducente.
Funcionarios de los tres estados coinciden que el programa incumplió su propósito de priorizar la deportación de inmigrantes fugitivos o peligrosos, toda vez que existe una deportación desproporcional de inmigrantes hispanos que cometieron delitos menores o violaciones de tráfico.
De la misma forma, oficinas de alguaciles denunciaron que el programa ha tenido el efecto de hacer más inseguras algunas comunidades, pues han socavado la confianza de los inmigrantes en la policía y propiciado que no se reporten crímenes por temor a ser deportados.
Aunque el DHS anunció en junio ajustes para evitar poner en proceso de deportación a aquellos inmigrantes que sean testigos o víctimas de crímenes, en especial aquellas personas que hayan sufrido en incidentes de violencia doméstica, se han mantenido los cuestionamientos al programa.
Sólo en el año fiscal 2011, el programa Comunidades Seguras ayudó a la identificación de 58 mil de los más de 216 mil inmigrantes criminales deportados.
Arturo Venegas, el ex jefe de la policía de Sacramento, California, sostuvo en la audiencia que Comunidades Seguras es un programa “profundamente defectuoso”, porque deriva en la deportación de inmigrantes que no tenían récord criminal o sólo había cometido infracciones de tránsito.
Venegas señaló que el programa debe ser reformado para enfocarse en exclusiva en individuos convictos de crímenes serios, limitar la autoridad de la policía para hacer cumplir leyes civiles y crear mecanismos de rendición de cuenta cuando se cometan injusticias.
En contraste, el presidente del Comité Judicial, el republicano de Texas, Lamar Smith, consideró que Comunidades Seguras es un “importante y efectivo programa de cumplimiento de la ley”.
“Comunidades Seguras tiene sentido. ¿Quién no quiere deportar a un inmigrante criminal?”, preguntó en la audiencia.(Notimex)