El Senado aprobó, por unanimidad y con 82 votos,  reformas constitucionales para eliminar el fuero de todos los funcionarios públicos, pero al mismo tiempo garantizar la inmunidad y evitar así que sea objeto de persecuciones políticas o de que cualquier Ministerio Público los persiga por la comisión de un delito.

 

Tras un debate, en el que las bancadas del PRI, PAN y PRD destacaron que al país le ha hecho mucho daño la impunidad de la clase política, los senadores Pedro Joaquín Coldwell, Pablo Gómez y Alejandro Zapata, entre otros, subrayaron que ésta es una reforma exigida por la sociedad porque protege la labor de quienes ejercen un cargo público, pero no impide que el Poder Judicial decida los delitos en los que pudieran incurrir los legisladores, funcionarios de los tres niveles de gobierno o el propio Presidente de la República.

 

El autor de la iniciativa, Pablo Gómez, hizo notar que en el caso del Presidente de la República se le podrá juzgar también, pero será hasta que la Cámara de Diputados concluya el debate de desafuero cuando se conceda a un juez la petición, según el diario Milenio

 

Sin embargo, el jefe del Ejecutivo podrá seguir en su encargo sin que la sentencia emitida por un juez aplique hasta que concluya su ejercicio.

 

“Fuero ya no habrá, lo que protegimos fue la inmunidad que sólo garantiza libertad durante el proceso y que no es fuero de impunidad, sino una figura para proteger el funcionamiento normal de los poderes públicos exclusivamente”, puntualizó el senador Gómez Álvarez.