Un grupo de mujeres del movimiento disidente cubano “Damas de Blanco”, que aboga por la liberación de los presos políticos, fue hostigado hoy por progubernamentales en una calle de La Habana después que realizaron una marcha pacífica a la salida de una misa.
Las “Damas de Blanco” fueron rodeadas por decenas de hombres y mujeres que les gritaban “mercenarias, gusanas” y coreaban consignas revolucionarias, en presencia de agentes de la policía que cortaron el tráfico de vehículos en la zona.
Las disidentes se sentaron en el suelo en medio de la calle en actitud de resistencia a abordar varios autobuses, a los que fueron forzadas a subir entre empujones de participantes en el “Acto de Repudio”, como se denominan estas manifestaciones de partidarios del Gobierno.
El incidente demoró una media hora y se produjo tras la marcha de unas 50 integrantes del colectivo disidente y un acto en memoria de su fallecida líder, Laura Pollán, en un parque cercano a la iglesia.
También denunciaron que fueron acosadas la víspera en su sede, la vivienda de Pollán, donde permanecieron retenidas 28 integrantes del colectivo desde el jueves hasta el sábado por la noche, y allí conmemoraron el Día internacional de los Derechos Humanos.
Berta Soler, portavoz del movimiento, dijo hoy a Efe que “no se respetó el derecho de salir a las calles, pero hicimos la jornada como queríamos porque ejercimos nuestro derecho a la libre expresión con la lectura de la Declaración Universal de los Derechos Humanos”.
También denunció la represión contra una veintena de militantes del grupo entre las decenas de disidentes que fueron detenidos los últimos días.
Según la opositora Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) en los nueve primeros días de diciembre se han producido más de 200 detenciones temporales en la isla. EFE