Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) rescató a 11 mujeres víctimas de trata durante diversos operativos en las regiones Soconusco y fronteriza de Chiapas y detuvo a los responsables.

 

De acuerdo con la PGJE, entre las afectadas figura una menor de edad de origen guatemalteco, quien era obligada a prostituirse al interior de un expendio de bebidas alcohólicas, ubicado en el municipio de Frontera Comalapa.

 

En una primera acción, agentes investigadores de la Fiscalía de Migrantes lograron el rescate de la joven de tan sólo 15 años originaria de aldea El Boquerón en Huehuetenango, Guatemala.

 

La menor fue enganchada por el propietario de la cervecería “Diego”, quien le prometió un trabajo como empleada doméstica, sin embargo, con el paso de los días la obligó a “fichar” con los clientes y cumplir jornadas de más de 12 horas al día.

 

Durante su declaración ministerial la víctima reveló que en el transcurso de dos meses recibió como pago 250 pesos, lo que representa tan sólo cuatro pesos por día, y en caso de resistirse, la joven era amenazada con ser entregada a las autoridades migratorias para ser devuelta a Guatemala.

 

Resultado del operativo implementado por la Fiscalía Especializada en Atención a Delitos Contra Migrantes fueron detenidos el propietario del lugar Pedro Hernández López y su administrador, Mario Alberto Salas Moreno y/o Mario Alberto Salas Morales, como probables responsables del delito de trata de personas.

 

Por otra parte, la fiscalía de distrito fronterizo Costa, con sede en Tapachula, llevó a cabo un operativo en coordinación con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, lo que permitió el rescate de 10 mujeres que presumiblemente eran coaccionadas a prostituirse en el bar conocido como “El Vaquero”.

 

Como parte de la averiguación previa número 975/C049-CT1/2011, fueron detenidos Gamagriel Calderón Molina originario de Huehuetán, Chiapas, y Reyna Suyapa Cabieles Godoy de Honduras.

 

La PGJE continúa con el desahogo de las investigaciones para conocer la existencia de otras víctimas y dar con el paradero de más involucrados.