El año pasado, Atlanta tuvo el mejor récord de la Conferencia Nacional en una memorable temporada con 13-3, recibía toda la postemporada en casa y parecía que su camino al Super Bowl estaba despejado, pero cayeron en su primer partido por paliza de 48-21 ante Green Bay.

 

En la presente temporada, los Halcones tuvieron un irregular comienzo y parecía que lo del 2010 fue más obra de la casualidad, pero en los últimos encuentros, Atlanta está jugando como el equipo del año pasado y muchos analistas los empiezan a considerar como seria amenaza para el bicampeonato de los Empcadores.

 

Para ejemplo, lo que pasó el jueves pasado, cuando despedazaron 41-14 a Jacksonville en un partido en el que su quarterback Matt Ryan pasó para tres anotaciones y 224 yardas y vio el final del partido descansando en la banca.

 

Cierto, los Jaguares no son un gran equipo, pero llegaron al encuentro luego de dar una paliza en su semana previa y parecía que podrían meter las manos, pero al término de la primera mitad ya iban abajo 27-0 y nunca se recuperaron. Sus puntos vinieron en el periodo final, cuando toda la banca de los Halcones estaba en el partido.

 

“Necesitamos seguir jugando así, aún creo que podemos ser mucho mejores”, dijo Ryand, quien tuvo un rating de 137.3, el segundo más alto de su carrera.

 

Por ahora, Atlanta todavía no tiene un lugar seguro en la postemporada. Su marca de 9-5 lo tiene como el más sólido candidato a un pasaje como equipo comodín por encima de los Leones de Detroit, Vaqueros de Dallas y Osos de Chicago, en ese orden.

 

Atlants tuvo un duro comienzo de año debido en parte a las lesiones de sus dos receptores Roddy White y el novato Julio Jones, quienes apenas pudieron alinear juntos desde hace unas semanas y el equipo se ha visto como muchos esperaban al inicio de la temporada.

 

Ante Jacksonville, esa mancuerna fue letal con White sumando 10 atrapadas para 135 yardas y un par de anotaciones mientras que Jones tuvo cinco para 85 yardas y un touchdown.

 

“Cuando hay gente como ellos hay que lanzarles pases largos, es un poco como el basquetbol, no todos los tiros de lejos van a caer, pero hay que seguir probando”, dijo Ryan.

 

La mejor parte de la historia para estos Halcones es que su defensiva no lo ha hecho mal. Ante los Jaguares sólo habían permitido tres primeros y diez en tres cuartos y el veterano John Abraham logró 3.5 capturas.

 

“Jugamos con todos los cilindros, pero no diría que fue un juego completo, diría que es un encuentro que nos ayuda mucho para mejorar la confianza”, dijo Abraham.

 

Atlanta todavía aspira a ganar el título de la División Sur. Por ahora Nueva Orleans es el líder con su marca de 10-3 pero los dos tienen un juego pendiente entre ambos el próximo lunes donde todo podría decidirse.

 

“La ventaja de haber jugado en jueves es que ahora tenemos 10 días para preparanos para el que será un juego definitivo”, dijo el entrenador Mike Smith.

 

Así parece que será.