Transcurren las primeras horas de este miércoles y los montones de basura se aprecian apilados sobre diversos puntos de la ciudad. El martes, el jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, dijo que el problema era encontrar el destino para unas dos mil 600 toneladas de basura, sin embargo, trabajadores de limpia advierten que los festejos por el Día de Reyes podrían complicar la situación.

 

Unas dos mil toneladas más de desechos podrían agregarse el 6 de enero con motivo de dicha celebración. Si antes del sábado no se encuentran tiraderos alternos para desechar la basura que se genera en el Distrito Federal, el fin de semana se podría duplicar la cantidad de desperdicios, alertaron.

 

Tras el cierre del Bordo Poniente, en diciembre pasado, la capital empezó a tirar su basura en cuatro vertederos alternos en el estado de México y Morelos, pero ante la negativa de autoridades y bloqueos de ciudadanos en carreteras, solamente Xonacatlán, en el Edomex recibe los desechos y Cuautitlán Izcalli acepta sólo la mitad de lo que se había acordado (seis mil toneladas) debido a las protestas de los ciudadanos.

 

“Tenemos cerca de 600 camiones (de un total de dos mil) que no están pudiendo descargar normalmente la basura por esta situación, que están haciendo cola por horas, principalmente en las delegaciones Cuauhtémoc e Iztapalapa”, señaló Horacio Santiago, secretario general de la Sección 1 del Gobierno del Distrito Federal, responsable del servicio de limpia.

 

“El cierre del bordo ya estaba anunciado y el gobierno no previó esta situación, no quiere gastar nada, ni un peso”, dijo Santiago. Agregó que esta situación también afecta el trabajo de los barrenderos de la capital, quienes debido al retraso en la recolección tienen que dejar los desperdicios en los aproximadamente mil basureros clandestinos que han surgido, según reconoció el martes el propio jefe de Gobierno.

 

“Tienen que entregar la basura a los camiones, pero como no están pasando o están pasando tarde, pues tienen que dejar la basura en la calle (…), sólo quiero aclarar que este no es un problema que provocamos nosotros, sino el gobierno de la ciudad”, subrayó Santiago.

 

Los problemas en la recolección de basura también comenzaron a generar pérdidas económicas para los más de 600 voluntarios que viajan en los camiones, quienes han visto reducidos los aproximadamente que se ganan a diario por propinas. Los ciudadanos, por su parte, depositan bolsas de basura en varios puntos de la capital, tal es el caso de vialidades primarias como el Eje 1 Norte, Avenida del Trabajo y Eje 1 Oriente.

 

Trabajadores del gremio reportaron este miércoles que en los 13 centros de transferencia que dan servicio a las 16 delegaciones de la ciudad, se empiezan a notar avances “pero muy lentos”, en la entrada de camiones; la situación más grave, precisaron, está en la planta de Cuauhtémoc, que da servicio a tres delegaciones: Venustiano Carranza, Iztacalco y la misma Cuauhtémoc.