La competencia después de la crisis está “a cuchillada limpia” y sólo aquellos países que lleven a cabo reformas podrán defenderse mejor, afirmó el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría Treviño.
Al participar en la inauguración de la Tercera Conferencia Anual en Reforma Regulatoria, destacó que la desregulación debe ser un proceso continuo para aumentar la competitividad y la cuota de mercado del país.
“Porque la competencia postcrisis está a cuchillada limpia y todos nuestros competidores se quieren quedar con los despojos de aquellos que se descuiden, y sólo aquellos que lleven a cabo las reformas van a poder defenderse mejor”, expuso el funcionario en el foro llevado a cabo en la Secretaría de Economía (SE).
En su opinión, la política de mejora regulatoria en México se ha convertido en política de Estado y de los estados, además de que éste es un proceso que “está prendiendo, hay un contagio positivo, muy constructivo, muy favorable”.
Ante el titular de la SE, Bruno Ferrari, así como funcionarios del sector y gobernadores de algunos estados que han reportado mayores avances en materia de desregulación, Gurría Treviño insistió en que la revisión de políticas de reforma regulatoria en México debe hacerse de manera constante y permanente.
“Los cambios de gobierno se suceden de manera regular, pero lo que debe ser permanente y para lo que debe haber continuidad es con la idea de que la reforma no sólo es de una sola vez… es indispensable para mantener la competitividad del país”, añadió.
En entrevista posterior y a pregunta expresa sobre la situación del país, el secretario general de la OCDE negó que 2012 sea un año perdido. “Debe ser un año de mucho trabajo 2012 para lograr los cambios que todavía están muy pendientes”.
Por otra parte, señaló que el gran problema en el mundo, no sólo en México, es el desempleo entre los jóvenes, y por ello el movimiento de los llamados “indignados”.