Aunque todavía ayer seguían los jaloneos y los pataleos, en las oficinas de Miguel Osorio Chong –secretario de Operación Política del PRI– están prácticamente definidos los nombres para buena parte de las candidaturas a gobernadores, senadores y diputados en varios estados de la República.
Para Tabasco se anota Luis Felipe Graham, un hombre muy cercano al gobernador Andrés Grenier. Graham se impondría sobre uno de los hombres cercanos a Peña Nieto: Jesús Alí, quien pelea la primera fórmula para la senaduría con Humberto Mayans.
En Morelos, José Armando Orihuela va ya por encima de Manuel Martínez Garrigós, ex presidente municipal de Cuernavaca, dada una serie de cuestionamientos que se han presentado hacia su persona.
Jalisco, como ya se sabe, quedó definido en la persona de Aristóteles Sandoval, alcalde de Guadalajara.
En el caso de Guanajuato, según trascendió, el senador Francisco Arroyo Vieyra –quien se veía en caballo de hacienda hasta hace 15 días—habría sido relegado de la primera posición por el líder nacional de la CNC, Gerardo Sánchez, quien a su vez podría padecer la entrada de último momento en el juego político de José Luis Romero Hicks.
Por lo que se refiere a escaños en el Congreso, algunos casos derivados de los términos de la alianza del PRI con el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y el Partido Nueva Alianza (Panal), se han corregido ya, en tanto que otros mantienes graves complicaciones.
En Puebla, refiere fuentes priistas, “ya se corrigió y quedó”. En Jalisco, otro tanto.
En Sinaloa “ya lo aceptaron, aunque hay malestar y se ha impugnado a Fernando González, yerno de la maestra Elba Esther Gordillo”, quien de acuerdo a la alianza figuraría para el Senado.
Por lo que toca a las senadurías en Puebla, se perfilan Javier López Zavala y Enrique Doger.
Donde más se ha complicado la situación es en Chiapas, debido también a los acuerdos que se tomaron en la Coalición “comprometidos con México”.
Ahí, se otorgó al PVEM la candidatura a la gubernatura en la persona del hoy senador Manuel Velasco Coello, dejando de lado a Samy David; en tanto que la senaduría en primera fórmula se otorgó (en el papel) a Mónica Arreola Gordillo, hija de Elba Esther.
La candidatura de Arreola ha sido ya impugnada por Cesar Augusto Santiago, con el argumento de que ella no es chiapaneca.
Este lunes, el CEN del PRI podría dar a conocer algunos de estos nombres cuando anuncie la estrategia de blindaje contra el financiamiento por parte del crimen organizado a los puestos de elección popular y los cambios en el PRI.
Antes del 22 de enero, las listas de candidatos deberán cerrase.