Washington. El Gobierno de Estados Unidos planteará esta semana su preocupación a Rusia sobre los informes que indican que suministrará a Siria 36 aviones de instrucción de combate Yak-130, en virtud de un contrato firmado en diciembre.

 

El secretario de Estado adjunto para Asuntos de Oriente Próximo, Jeff Feltman, llegó hoy a Moscú y planea tratar el asunto en sus encuentros con funcionarios del Gobierno ruso, indicó hoy la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland.

 

“Hemos visto los informes de prensa (sobre la venta), y si son ciertos sería algo bastante preocupante. (…) Obviamente, preguntaremos sobre ello”, señaló la portavoz en su conferencia de prensa diaria.

 

El diario ruso Kommersant informó hoy sobre el acuerdo, para lo cual citó a fuentes próximas a la agencia rusa de exportación de armamento. El rotativo cifró el valor del mismo en unos 550 millones de dólares, a razón de 13,5 millones por cada avión.

 

El posible acuerdo se suma a otro que también despertó preocupación en Washington a mediados de este mes, cuando el Departamento de Estado contactó a Moscú acerca de un barco ruso sospechoso de transportar munición a Siria.

 

“No hemos conseguido aclarar realmente qué ocurrió con aquello”, reconoció hoy Nuland.

 

Siria será “el asunto número uno” en la agenda de Feltman en Rusia, país al que insistirá para que respalde una resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU que aumente la presión para la salida del poder del presidente Bachar Al Asad, añadió la portavoz.

 

Los ministros de Exteriores de la Liga Árabe acordaron el domingo instar a Al Asad a transferir sus poderes al vicepresidente del país, y a formar un gobierno de unidad nacional en el plazo de dos meses para convocar elecciones presidenciales, una propuesta que fue rotundamente rechazada hoy por Damasco.

 

Nuland calificó hoy esa resolución de “excepcional” y confió en que el Consejo de Seguridad de la ONU adopte por su parte una decisión que “refleje firmemente las conclusiones del informe de la Liga Árabe y las áreas que ha señalado en las que todavía hay trabajo por hacer”. (EFE)