El Consejo General del IFE declaró infundadas dos quejas del PRI contra el presidente Felipe Calderón, una por el programa “The Royal Tour” y otra sus declaraciones a The New York Times sobre presuntos vínculos del tricolor con el crimen organizado.

 

El colegiado consideró no fundadas las acusaciones por violación a los principios de libertad de los procesos electorales, libertad del sufragio e imparcialidad de los servidores públicos, promoción personalizada de un servidor público y uso de recursos públicos para promoción.

 

En sesión extraordinaria que inició cerca de medianoche del miércoles y se prolongó hasta pasadas las tres de la mañana de este jueves, el Consejo General resolvió por unanimidad declarar infundadas las quejas del Revolucionario Institucional.

 

Sin embargo, al expresar un punto de vista genérico, el consejero electoral Marco Antonio Baños señaló que los servidores públicos están, al igual que todos, a observar el principio de imparcialidad en el desahogo de los procesos electorales.

 

Consideró que este asunto es preocupante, no desde la perspectiva del uso de los recursos públicos sino de la imparcialidad como principio rector del proceso electoral.

 

En su oportunidad, el consejero del Poder Legislativo del PAN ante el IFE, Agustín Castilla, dijo “estamos ante una estrategia político electoral para golpear al presidente de la República, y tenemos claro que todo lo que haga o diga será motivo de la presentación de una queja del PRI”.

 

Por ello, señaló que es evidente que se busca amordazar al titular del Ejecutivo Federal e inhibir u obstaculizar el ejercicio de sus derechos y el cumplimiento de sus responsabilidades.

 

En tanto, el representante del PRI ante el IFE, Sebastián Lerdo de Tejada habló de la intromisión del titular del Ejecutivo Federal en los procesos electorales y aseguró que no se trata de un asunto declarativo ni siquiera de estrategia de debate.

 

Al respecto, recordó que la Sala Superior del Tribunal Electoral Federal declaró al presidente de la República, por primera vez en la historia de México, violador de la Constitución y “no lo decimos nosotros sino el órgano jurisdiccional que dirime las controversias de carácter electoral”.