Más de la mitad de los niños menores de tres años no acuden a su revisión de cada mes con el pediatra a pesar de que ésta deber rutinaria hasta los tres años de edad para detectar y evitar enfermedades que pueden prevenirse.

 

“Las mamás acuden siempre durante el primer año, pero después ya nos preguntan cada cuánto deben venir. La respuesta es que deben seguir haciéndolo para verificar la talla, el peso, el estado de nutrición y medir la masa encefálica. Todo esto nos permite verificar que estén creciendo correctamente y que no haya una falla en su cerebro que atrofie alguna otra parte del cuerpo”, advirtió el médico.

 

Si la gente considerara estas medidas se reduciría el número de muertes infantiles que se registran en el país. Actualmente mueren 20 niños de esta edad por cada mil que nacen nacimientos, es decir, 40 mil menores pierden la vida por problemas al nacer, pero también por enfermedades adquiridas en su etapa de bebé.

 

Para cumplir el objetivo del milenio propuesto por la Organización de las Naciones Unidad de reducir la mortalidad en este grupo poblacional, los médicos están trabajando en la prevención.

 

En el marco del XIV Congreso Interamericano de Pediatría, Montes de Oca resaltó que hay tres aspectos que se deben revisar constantemente: la dieta del niño, manejo del crecimiento y la aplicación de la vacunas.

 

Con ellas se podrán prevenir enfermedades propias de la edad, pero también padecimientos crónicos-degenerativos, como la hipertensión o diabetes, que se presentan a edades cada vez más tempranas.

 

De acuerdo con el médico, 80% de los padres de familia se preocupan por trabajar en estas tres áreas, “aunque el porcentaje debería ser más alto”.

 

“Así podríamos tener un mejor control de otras enfermedades, no de todas porque eso es imposible, pero sí de un 60% o 70% de las que hoy conocemos”, recordó el también coordinador del congreso.

 

La prevención, dijo, también ayuda a combatir las enfermedades gastrointestinales y las infecciones respiratorias, que antes aquejaban constantemente al menor. “Gracias a las vacunas, los cuadros básicos y su aplicación es que están más protegidos porque una vacuna es más efectiva que un antibiótico y eso lo están entendiendo”.

 

Añadió que los pediatras también deben conocer el medio el que se desenvuelve el menor: la familia, el medio ambiente, la guardería, el trabajo de la madre. Sólo de esta manera podrá comprender los padecimientos del menor.

 

 

Recomendaciones del pediatra:

 

 

*Consultar la dieta del niño

 

 

*Llevar los detalles de su crecimiento

 

 

*Estar pendiente de la cartilla de vacunación