Los efectos de la sequía en el país agravan la situación alimentaria de unos 2.5 millones de mexicanos y, de no aplicarse medidas para contrarrestar la pérdida de productos agrícolas y ganadería, esta población corre el riesgo de padecer hambruna, advirtió el investigador Emilio Romero Polanco.

 

En un comunicado, el especialista del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) de la UNAM sostuvo que en este momento el cambio climático es el factor decisivo en el déficit de la producción nacional de granos básicos.

 

Por ello, agregó, es urgente monitorear la gravedad del problema y atenderlo en el corto plazo, para evitar la falta de alimentos en la nación.

 

El 50 por ciento de los municipios están afectados y se calcula que 1.4 millones de hectáreas padecieron los daños provocados por las condiciones climáticas adversas. En 2011 se perdieron 3.2 millones de toneladas de maíz, 600 mil de frijol y 60 mil cabezas de ganado.

 

Ante la situación de alarma generalizada por los efectos del cambio climático en el campo, el experto consideró paradójico que México cuente con más de 147 mil millones de dólares en reservas internacionales pero no disponga de los recursos necesarios para atender la emergencia, calculados en menos de mil millones de dólares.

 

El integrante de la Unidad de Investigación Economía Mundial del IIEc destacó que es necesario replantear la importancia estratégica del agro y de la autosuficiencia alimentaria.

 

Al no impulsar la producción local de alimentos, México recurre a los mercados internacionales, en una coyuntura marcada por la escalada de precios en granos básicos y cereales.

 

En este contexto, es necesario el rediseño de las políticas de ciencia y tecnología, además de reubicar las regiones de producción tradicionales –actualmente localizadas en el centro y noreste– al sur del territorio. (Notimex)