A cinco días de la contienda interna panista, Josefina Vázquez Mota denunció una “guerra sucia” en su contra a través de redes sociales con miras a desprestigiar su precandidatura presidencial, al tiempo que se dijo víctima de espionaje.
Entrevistada tras reunirse con más de mil jóvenes panistas encabezados por el líder juvenil Jonathan García, Vázquez Mota informó que su equipo de abogados estudia “cuál es el paso a seguir”, pues dijo que la intervención telefónica es un delito contrario al espíritu democrático de libertad que ha caracterizado al PAN.
“Yo no me voy a detener, no he lastimado a nadie, no he agraviado a nadie y mucho menos, como hoy está sucediendo que alguien está cometiendo sin duda un delito grave”, manifestó.
Aclaró que continuará con su estrategia de campaña de invitar a todos los panistas a participar en la contienda interna y en un voto libre decidir por su proyecto político.
“Lamento no solamente que haya una guerra sucia desde hace días en las redes sociales, si no que hoy prácticamente en un delito se intervienen llamadas telefónicas”, agregó la ex titular de Desarrollo Social.
“Me parece muy grave, lo lamento y creo que justamente es lo contrario al espíritu democrático de libertad, de ciudadanía que siempre ha caracterizado a nuestro partido”, abundó a unas horas de llevarse a cabo el segundo debate con sus adversarios Santiago Creel y Ernesto Cordero.
A pregunta expresa, aceptó que no ha escuchado la grabación que se difunde en las redes, sin embargo reconoció que “todo parece indicar que así es (una guerra sucia)”.
De tal suerte resaltó que quien haya filtrado las llamadas o intervenido una conversación comete un delito, por lo que tendrá que enfrentar la ley.
Recordó que la política debe traducirse en diálogo, en la construcción de un México mejor, tiene que ser un compromiso cotidiano, porque “no podemos hacer política de a medias partiendo de la confrontación y de la división”.