Los tres precandidatos presidenciales del PAN se enfrentaron en un último debate previo a las elecciones internas del 5 de febrero próximo, en donde se cuestionaron inasistencias a sesiones legislativas, falta de mención sobre el tema monopolio y un urgente llamado a la unidad partidista.

 

Santiago Creel, Josefina Vázquez Mota y Ernesto Cordero, fueron convocados a un debate que cambió su formato respecto al del pasado 17 de enero y permitió una mayor confrontación entre los tres.

 

Acusaciones y equivocaciones como la que tuvo Cordero al llamar Vicente Calderón al Presidente Felipe Calderón cuando refirió que quiere continuar con su legado; o la comparación de Josefina con Jorge Kahwagi.

 

El moderador fue el conductor Leonardo Curzio quien formuló seis preguntas que fueron elaboradas por la Fundación Rafael Preciado. La entrada del debate fue la exposición de las propuestas y prioridades que cada uno tiene en caso de ganar la candidatura.

 

Cordero abrió el debate, expuso sus ideas de un México en donde exista igualdad y de inmediato lanzó una ofensiva al señalar que el candidato del PAN necesita una trayectoria probada y no debe tener miedo a debatir.

 

Santiago Creel centró su discurso en la necesidad de contar con un país que requiere de una urgente seguridad para que con ello llegue la inversión, entre otros.

 

Vázquez Mota refirió durante toda su participación la necesidad de que todos los panistas voten en libertad. En cada momento en que le tocó tomar la palabra, el cierre fue un llamado a los panistas para que el 5 de febrero próximo voten en libertad.

 

Fueron tres los temas que se tocaron: estado de derecho, justicia y seguridad; crecimiento económico y desarrollo sustentable, y combate a la pobreza.

 

Creel cuestionó a Josefina sobre el por qué si habla sobre la inversión en el mercado interno, por qué no tocó el tema de los monopolios que son los que tienen dominado al País.

 

“Venimos a debatir, estamos hablando de tema económico, no he escuchado de Josefina y Ernesto la palabra monopolio, ese es un tema pendiente de la administración panista, los errores hay que reconocerlos. Josefina habló de mercado interno y no mencionó el monopolio, yo creo que son los temas que debemos debatir”, expresó.

 

Atacó a la diputada con licencia, al señalar que si se defiende a los gobiernos panistas, es necesario gobernar con ellos y al menos cuando Vázquez Mota fue secretaria de Desarrollo Social, la acusó de tener sólo un subsecretario panista, en tanto que cuando él fue secretario de Gobernación nombró a puro militante en los puestos estratégicos de la dependencia.

 

En el tema de justicia, estado de derecho y seguridad, a Vázquez Mota se le cuestionó sobre transparencia y rendición de cuentas, a lo que ella respondió con el tema de fortalecimiento del federalismo, hecho que Creel Miranda criticó porque aseveró que una cosa no tiene que ver con la otra.

 

Al final, Santiago Creel dio un espaldarazo a Vázquez Mota al llamar a la unidad partidista.

 

Cordero atacó a Vázquez Mota. La acusó de que cuando fue diputada federal y coordinadora de la bancada del PAN en la Cámara de Diputados, durante el primer semestre de 2011, de 134 votaciones que hubo ella estuvo sólo en 126, que fue la diputada que más se ausentó, incluso más que el diputado del Partido Nueva Alianza, Jorge Kahwagi.

 

Josefina le respondió que ella tuvo el 95 por ciento de asistencia cuando se desempeñó como diputada federal y de su labor legislativa y que el presidente Felipe Calderón le hizo un reconocimiento.

 

Cada uno de los precandidatos defendió su trayectoria y sus proyectos. Josefina se concentró en defender el tema educativo, el federalismo y la reactivación del mercado interno; Creel se centró en el tema de inseguridad y Cordero en la necesidad de contar con alguien capaz de dirigir la economía de un país.

 

Los tres coincidieron en defender los logros que ha tenido el PAN, que en sus gobiernos, ha mantenido la estabilidad económica.

 

Durante el debate, estuvieron presentes el dirigente nacional del PAN, Gustavo Madero y el presidente de la Comisión Nacional de Elecciones, José Espina.

 

Cada uno asistió con su equipo más cercano.