Uno de los retos en el rediseño de las comisiones de derechos humanos, a partir de las modificaciones a la reforma constitucional, es lograr que las recomendaciones sean aceptadas y que se cumplan, estableció el presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Luis Raúl González Placencia.
En el acto inaugural del rediseño de esos organismos de derechos humanos que se desarrolla en el Museo de la Ciudad de México, el ombudsman capitalino dijo que en el caso de la CDHDF ya se adelantaron para cumplir con lo establecido en el artículo 1 de la Constitución federal, que se reformó en materia de derechos humanos.
Sin embargo, consideró que hace falta fortalecer a estas comisiones para que las autoridades a las que se les giran recomendaciones por una forma de actuar contraria a la protección de estos derechos de verdad cumplan lo que se establece en esos documentos.
González Placencia planteó que con la reforma en mención ahora estos organismos pueden atender las quejas relacionadas con los derechos humanos laborales, por lo cual se deben establecer visitadurías para esa atención, como la que ayer –dijo- comenzó a funcionar en la Comisión a su cargo.
Respecto a la actuación de los gobiernos en respuesta a las recomendaciones, señaló que un gobierno democrático no tiene porque regatear la competencia de la Comisión, sino reconocer que se trata de una instancia que forma parte del Estado y que tiene la autoridad moral y técnica para hacerle recomendaciones.
Al ahondar sobre la agenda que abordan en ese foro, dijo que una de las cuestiones a debate es la autonomía presupuestal, “porque es uno de los planteamientos que se hacen de los Principios de París, que es la plataforma que a nivel internacional señala las características de estas instituciones”.
Apuntó que la autonomía no solamente tiene que ser una autonomía de gestión, “sino que es importante que se generen condiciones para que a través del presupuesto no se ejerza ningún tipo de presión”.