La secretaria de Estado de Estados Unidos (EU), Hillary Clinton, criticó hoy en Múnich el veto de Rusia y China a la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas con respecto a Siria.
“Es difícil de entender que aún hay quienes, después del día más sangriento hasta la fecha en Siria, impidan a la comunidad internacional condenar esta violencia”, aseguró Clinton nada más conocer el resultado de la votación.
Clinton realizó estas declaraciones en el marco de la segunda jornada de la Conferencia de Seguridad de Múnich (MSC), el “Davos” de la política exterior y la defensa, que congrega desde ayer y hasta mañana a decenas de ministros, militares, empresarios y expertos en defensa y seguridad de más de 70 países.
“Me gustaría preguntarles (a Rusia y China): ¿Qué más tenemos que saber para actuar con decisión?”, agregó la secretaria de Estado.
Clinton mantuvo hoy una reunión in extremis con el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, para intentar limar diferencias, pero reconoció que “no fue posible” alcanzar un acuerdo.
Lavrov explicó horas antes que Moscú exigía dos modificaciones del texto para apoyarlo: la condena de la violencia de los militares rebeldes y el relajamiento del calendario impuesto para el proceso de transición política en Damasco.
En una rueda de prensa previa a conocerse el resultado de la votación en Nueva York, la secretaria de Estado advirtió de que si la comunidad internacional no actúa, Siria puede acabar sumida en una “guerra civil”.
“Me temo que el coste de no actuar es la guerra civil”, aseguró, después de explicar el creciente riesgo de que el país se vea envuelto en “conflictos sectarios” y el “caos”.
No obstante, descartó categóricamente la posibilidad de una “intervención militar” en Siria, una opción que no se ha contemplado “desde el principio”. EFE