El ex gobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington Ruvalcaba, es acusado por la DEA de recibir millones de pesos de Los Zetas y de estar implicado en el asesinato del ex candidato a la gubernatura, Rodolfo Torre Cantú.
La agencia antidrogas estadunidense involucra al ex mandatario y a Antonio Peña Argüelles, detenido el miércoles en San Antonio, Texas, en actividades para blanquear dinero en Estados Unidos para la organización criminal.
Particularmente acusa a Yarrington de recibir sobornos del cártel del Golfo y de Los Zetas a cambio de permitir y proteger el trasiego de drogas en Tamaulipas cuando fue gobernador, de 1999 a 2004, e incluso durante su campaña electoral.
De acuerdo con una denuncia presentada por la DEA en una corte de Texas, el ex gobernador y Peña habrían estado detrás de la ejecución de Torre Cantú en junio de 2010, debido a que se habrían quedado con un soborno de cinco millones de dólares, destinados presuntamente al ex candidato priista.
Peña Argüelles huyó desde noviembre a San Antonio tras el crimen de su hermano. Una manta hallada en el lugar acusaba a los hermanos Antonio y Alfonso de robarle a Los Zetas y de ser los culpables de la muerte de Rodolfo Torre Cantú.
Mauricio Fernández, jefe de la DEA en San Antonio, confirmó la investigación en contra de Yarrington y el proceso contra Peña. “Esta ha sido una larga investigación de la DEA, el Departamento de Tesorería y la oficina del procurador General de Texas…hemos estado buscando a esta persona por un tiempo. Sabemos que él está vinculado a los carteles mexicanos”.
Apenas el 30 de enero, la PGR se reveló que los ex gobernadores Tomás Yarrington, Eugenio Hernández y Manuel Cavazos eran investigador por presuntos nexos con el narcotráfico.
Relaciones peligrosas
Según la DEA, la relación entre Peña Argüelles y los cárteles comenzó a finales de la década de 1990, cuando uno de sus ranchos, al sur de Nuevo Laredo, fue utilizado para el traslado de drogas. La relación creció hasta que se convirtió en intermediario entre los cárteles y algunos políticos, entre ellos Yarrington Ruvalcaba y un ex alcalde de Nuevo Laredo.
Peña recogía ganancias de la droga en Brownsville, Roma, Laredo y Las Vegas, según la denuncia, la cual da detalles de cuentas bancarias que abrió en Texas y California, con operaciones de más de 10 millones de dólares, así como otras transferencias millonarias de un banco mexicano a una cuenta de Estados Unidos.
Esta persona invirtió en propiedades en Laredo, Texas, y en un restaurante en San Antonio. Tras un proceso de divorcio en 2009, Peña mantuvo una cuenta de 5 millones de dólares en Suiza y ranchos en Tamaulipas por valor de 10 millones de dólares.
En 2008, tras pasar casi dos meses encarcelado en México, Peña se retiró a San Antonio, donde se reunió con Yarrington. De acuerdo con testimonios de testigos protegidos de la DEA, en aquella ocasión ambos discutieron por una disputa financiera con Miguel Treviño Morales, Z-40, fundador de Los Zetas, junto con Heriberto Lazcano, El Lazca.
Según la denuncia en Texas, Antonio y Alfonso Peña Argüelles tomaron 5 millones de dólares de Treviño Morales “a cambio de protección política” para la organización criminal. Sin embargo, los hermanos sólo se embolsaron el dinero.
La demanda de la DEA refiere que Los Zetas creyeron haber enviado un soborno millonario a Rodolfo Torre Cantú, quien en 2010 fue candidato del PRI a gobernador de Tamaulipas. Pero el político nunca recibió el soborno y también se negó a reunirse con los representantes de los narcotraficantes. El priista fue ejecutado el 28 de junio de 2010.
Casi un año más tarde, dijo un informante de la DEA, Los Zetas se enteraron de la traición de los hermanos Peña, secuestraron a Alfonso en noviembre de 2011, cuyo cuerpo fue hallado, el 29 de ese mes, colgado en un monumento de Nuevo Laredo.
Ese día, según la acusación, Antonio Peña recibió dos mensajes con amenazas de Treviño Morales. “No seas un idiota y presta atención a los que roban en y sobre el candidato, que era por el negocio que usted tiene con (el jefe del Cártel del Golfo, Jorge Eduardo) Costilla, Tomás (Yarrington Ruvalcaba, ex gobernador) y Osiel Cárdenas (ex jefe del cártel del Golfo)”.
El otro decía “Tu hermano también me dijo acerca de los nombres supuestos de las propiedades que tienes con Osiel y también sé que están en Laredo, Texas, y San Antonio”.
Después de la muerte de su hermano, Antonio Peña abandonó Nuevo Laredo y huyó a San Antonio, donde fue detenido el pasado miércoles.
Proceso difícil
Phil Jordan, ex director de la DEA en El Paso, Texas, admitió que será difícil distinguir entre los hombres de negocios legítimos y los dedicados a lavar el dinero de los narcotraficantes mexicanos y los políticos corruptos.
Explicó que el modus operandi de estos “empresarios” es mantenerse alejados de cualquier contacto con los traficantes de droga y solamente lavar el dinero a través de negocios legítimos.
“Como resultado se unen a la cámara de comercio y sin sospechar nada a los hombres de negocios reales comienzan a frotarles los codos y se convierten en amigos hasta el punto incluso de contribuir con políticos de este lado de la frontera”, dijo.
Por su parte, la Secretaría de Gobernación aclaró que las acusaciones de la DEA en contra de Tomás Yarrington “corresponden a esa institución y deberán tomar su curso bajo la jurisdicción de ese país”.