Con una inversión de 23.3 millones de pesos y tras un año y medio de trabajos de remodelación, anoche fue inaugurada la sala de cine “Carlos Monsiváis”, en el Centro Cultural Universitario (CCU), donde también fueron reabiertas las salas “Julio Bracho” y “José Revueltas”.

 

El acto fue encabezado por el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro Robles, quien celebró la reapertura de dichas salas y mencionó que su retraso se debió a la contaminación sonora, la cual dijo, “ha quedado debidamente resulta”.

 

“Son tres salas que en su conjunto deben de tener poco más de 240 butacas, y que están diseñadas debidamente para cumplir en su totalidad los asuntos de seguridad y que tiene algunas facilidades para personas con disparidad. Estoy satisfecho y orgulloso con ello”, señaló el rector.

 

A propósito de la sala dedicada al escritor mexicano Carlos Monsiváis (1938-2010), Narro Robles comentó que se trata de un espacio que le rinde homenaje a quien fuera considerado uno de los cronistas más importantes del siglo XX mexicano.

 

“Cuando hablamos de Monsiváis, hablamos de muchas cosas, de una conciencia crítica, de un personaje de la vida intelectual, de un hombre de letras, comprometido, claridoso, expresivo y muy universitario.

 

“Y junto todo eso, hablamos de un hombre que un profundo conocedor del cine, un personaje que hizo muchas cosas por el cine; nos pareció importante que a ese personaje multifacético y universitario extraordinario, prolongáramos su memoria y se perpetuara su pensamiento con una de las salas”, destacó.

 

Tras su remodelación, la Sala “Julio Bracho” cuenta con 161 butacas y cuatro lugares para personas con discapacidad; la Sala “Carlos Monsiváis” con 54 butacas, mientras que la “José Revueltas” tendrá 60 asientos; ambas ofrecerán dos lugares para discapacitados.

 

Avaladas por las normas de la Federación Internacional de Archivos Fílmicos (FIAF), las salas destacan por su sistema de proyección y audio.

 

Las tres tendrán capacidad para proyectar cintas en 35 y 16 milímetros; de manera particular, la Sala “Julio Bracho” también podrá exhibir películas en formato digital y en 3D.

 

“Los espacios se redistribuyeron, y ahora los pasillos son más amplios y cuentan con un pequeño elevador para subir a las personas en silla de ruedas. Además, en cada sala existe una especie de foso que permite la colocación de músicos, ya sea un pianista o un pequeño ensamble para cuando se exhiban películas silentes con acompañamiento musical”, dijo Guadalupe Ferrer directora de Actividades Cinematográficas.

 

Por lo que hace al sonido, comentó que los espacios están acústicamente preparados para ofrecer la mejor manifestación del sonido de la película.

 

En el nuevo espacio, será posible presentar diversas exposiciones alusivas a los ciclos cinematográficos y encuentros. (Notimex)