Sin duda, un buen ingrediente puede hacer toda la diferencia cuando se trata de cocinar un platillo suculento. Hasta en las preparaciones más sencillas, como una ensalada, si se elabora con ingredientes mediocres, lo más probable es que el resultado final sea mediocre. Un buen ingrediente es fundamental.
Para asegurar estos ingredientes de primera lo importante es encontrar a tus proveedores de confianza. Es muy diferente un “marchante” que no te conoce y te vende por una sola vez, a alguien con quien ya has establecido una relación personal. Cuando existe, te ayudarán a seleccionar los mejores productos de la temporada y hasta en ocasiones te guardaran lo mejor. Hoy en día, en la época de los supermercados donde compramos todo para la casa en un solo lugar, hemos perdido la tradición de nuestras abuelas de ir a tiendas especializadas y forjar relaciones personales y de largo plazo con nuestros proveedores.
Recuerdo cuando acompañaba de niña a mi mamá al mercado de la Paz, en Tlalpan. Es un mercado precioso, que data de la época porfirista. Íbamos a la carnicería con un carnicero que tenía una voz privilegiada y siempre estaba cantando. Luego a la pollería en donde los pollos estaban alineados como si estuvieran en una formación militar. Después con la señora que vendía tortillas. También visitábamos a la señora del mole, quien a pesar de ser muy seria, armaba casi matemáticamente cada mole, agregándole distintas variedades de chile, especias y pastas, para que quedara al gusto de cada clienta. Pero de todas estas tiendas, no había lugar que me produjera más placer que el comprar verduras y frutas con doña Cha.
Al llegar a su puesto me consentía con probaditas de naranjas, mangos y otras delicias de temporada que al comerlas se escurrían sus jugos por toda mi barbilla y dejaban pegajosas mis manos. Años después, a pesar de ya no vivir tan cerca, regreso con gusto a visitar a doña Cha y a su hijo Sergio cada vez que puedo a la Canasta Encantada. A lo largo de los años hemos forjado una relación de mucho cariño y me encanta saber que llevamos más de 25 años de conocernos. Me da mucha risa cuando me preguntan por mi hermanita (quien es dos años menor que yo) y de chiquita no tiene nada. Cuando tengo eventos especiales, les hablo con anticipación y les pido de todo: arúgula, bulbos de hinojo, lechugas gourmet.
Las seleccionan como si fueran para su consumo personal en la Central de Abastos. Es el mejor lugar que he encontrado para comprar mis frutas y verduras. Estoy agradecida con mi mamá de que haya cultivado tantos años esta relación y que hoy en día, pueda yo también beneficiarme y disfrutarla.
Sin embargo, mentiría al decir que siempre compro todo en pequeños locales. También disfruto de la comodidad de recibir los ingredientes en casa. Sin duda esta tarea sólo puedo asignarla a personas profesionales que toman con seriedad el trabajo de entregar y seleccionar los ingredientes como si yo lo hiciera personalmente. Ingredienta cumple con todos los requisitos para hacerlo. Llevan muchos años proveyendo a los mejores restaurantes de México de productos marítimos provenientes de Baja California y hace relativamente pocos años decidieron abrir este pequeño negocio para ofrecerle a los consumidores más pequeños la misma calidad de ingredientes.
Hace unas semanas pedí un róbalo entero que estuvo fabuloso. Venden todo tipo de productos de mar frescos y algunos hasta vivos, como los ostiones y mejillones, verduras e ingredientes orgánicos, quesos nacionales e importados y hasta exotiqueses como trufas frescas traídas desde Italia. Desde la primera vez que los contacté, me impresionó su honestidad para ayudarme a seleccionar los ingredientes de mi pedido. En lugar de venderme un queso mozzarella importado carísimo, me invitaron a probar el nacional que no me decepcionó. No importa que tan grande o pequeño sea el pedido, siempre es un servicio de primera. Estos son los detalles que aprecias y sobre todo que te hacen seguirles comprando. Lo único que podría parecer complicado es que hay que hacer los pedidos con algunos días de anticipación, sin embargo, hasta esto resulta parte de la experiencia, al tener la expectativa del manjar que comerás.
Sin duda, son dos maneras muy diferentes de hacer compras, pero al final imposibles de replicar en un supermercado. En las grandes tiendas soy una más de los miles que las visitan. La alta rotación de personal y el alto volumen de clientes impide forjar relaciones de largo plazo. Por lo mismo, si quieres buenos ingredientes, tienes que desarrollar una red de proveedores personal y dedicarle un poco más de tiempo. Encontrar a esas personas a quien les confías la selección de ingredientes hará toda la diferencia en el tipo de materia prima con que prepararás tus alimentos. Te aseguro que lo agradecerás al saborear lo que preparaste en casa, a sabiendas de que son productos de primera. No hay nada como un buen ingrediente y un buen proveedor.
Espero que tengas un maravilloso domingo y recuerda, hay que buscar el sabor de la vida. @anasaldana
La Canasta Encantada
Plaza de la Constitución No. 1
Col. Tlalpan Centro, C.P. 14000
Ingredienta
Tel. 55.40.51.28
ventas@ingredienta.com
Entregan en toda la República con costo de flete y gratuitamente en la Ciudad de México.
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App para comprar verduras. Veggies – Vegetable shopping companion. Es un app que menciona las principales verduras y nos informa sobre cómo seleccionarlas, almacenarlas, utilizarlas, así como su información nutricional. Costo $12 pesos.