Un pueblo español ha dado luz verde a la instalación de una plantación de cannabis en la localidad por considerar que supone una oportunidad para crear puestos de trabajo y liquidar la deuda municipal, en el contexto de grave crisis económica que vive España.

 

El Ayuntamiento de Rasquera, en la región de Cataluña (noreste), ha votado a favor de la cesión de terrenos a la Asociación Barcelonesa Cannábica de Autoconsumo (ABCDA) para plantar mariguana, un proyecto que supondrá la creación de 40 empleos y generará 1.33 millones de euros (1.78 millones de dólares) en dos años.

 

En España está despenalizado el consumo y el cultivo privado de cannabis, cuyo uso para paliar los síntomas de diversas patologías, como el cáncer, es un asunto muy controvertido, pero algunos pacientes con enfermedades que cursan con dolor recurren a la mariguana para mitigar el sufrimiento.

 

Tras la votación, el martes por la noche, el alcalde del municipio, Bernat Pallisa, aseguró que el proyecto es respaldado por una mayoría social en el pueblo, al tiempo que aseguró sentirse “pionero a nivel europeo” y “convencido de crear un precedente”.

 

También se mostró “sorprendido” por el eco del proyecto en Alemania, Italia, Argentina o EU, desde donde le han llamado para solicitar información, mientras que una empresa se ha puesto en contacto con él interesada en poner en marcha una casa rural en el municipio para enfermos de cáncer, fibromialgia y esclerosis múltiples.

 

Anunció también que la próxima semana se celebrará una asamblea en Rasquera donde científicos, abogados y médicos explicarán el proyecto a la población.

 

Sin embargo, para la oposición, la iniciativa “roza el límite de las actividades no lícitas”, por lo que votó en contra del proyecto y reclamó “una consulta vinculante”.

 

El pueblo agrícola de Rasquera, gobernado por los independentistas catalanes de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), tiene una población de casi 900 y adeuda 1.3 millones de euros.

 

El proyecto de plantación de cannabis, que surgió hace siete meses de la ABCDA, una entidad con fines lúdico-terapéuticos con unos 5 mil socios, es visto por las autoridades locales como una oportunidad para revitalizar la maltrecha economía local, muy castigada por la crisis.

 

De acuerdo con el contrato entre el Ayuntamiento y la ABCDA, la asociación abonará 30 mil euros en el momento de la firma del convenio, 6 mil euros más en el plazo de un mes, y 650 mil euros anuales, durante dos años, para poder utilizar los terrenos que se le cederán.

 

Esto permitirá al municipio liquidar en dos años su deuda.

 

El proyecto, que ha generado una gran expectación en la localidad, creará cinco puestos de trabajo directos “y más de 35 indirectos”, en políticas ambientales o gestión de bosques.

 

La finca elegida tiene una extensión de 7 hectáreas, según el regidor, “pero no todas se dedicarán al cannabis”.

 

España, que atraviesa una grave crisis económica, cerró 2011 con un déficit del 8.51% del PIB, frente al 6% previsto por el anterior Ejecutivo y una cifra récord de 5 millones 273 mil 600 desempleados, el 23.49 % de la población activa (EPA). (EFE)