Tal como en la Ley del Talión el PRI ha decidido que no dejará pasar un solo golpe político que provenga del gobierno o del PAN en la actual contienda y, en una estrategia de “ojo por ojo”, los priistas responderán a los ataques “de inmediato y de manera proporcional”.
La decisión tomada en las cúpulas priistas, entre el Comité de Campaña de Enrique Peña Nieto y el CEN priista que encabeza Pedro Joaquín Coldwell, busca contrarrestar la ofensiva que, esperan, se dará en las campañas contra su candidato presidencial y evitar que las “tácticas de guerra sucia” que pudieran emplearse del lado gubernamental y panista surtan efecto.
En la valoración del PRI sobre cómo responder a esas campañas sucias, pesó mucho el ejemplo de Andrés Manuel López Obrador en el 2006, cuando el entonces candidato de la Coalición “Por el bien de todos” se negó a contestar a los ataques y golpes sucios en su contra –“porque el pueblo no es tonto”- y al final esos ataques y campañas mediáticas de desprestigio le hicieron mella y le afectaron en las encuestas.
“No nos va a pasar lo mismo que a López Obrador, no nos vamos a quedar de brazos cruzados mientras el presidente y los asesores de campañas sucias del PAN nos lanzan lodo. A cada golpe, a cada señalamiento habrá una respuesta inmediata y proporcional”, indicó un priista de la cúpula.
El primer ejemplo de la estrategia del Talión del PRI ocurrió hace dos semanas cuando el CEN priista acusó a la hermana del presidente, Luisa María Calderón, de desviar recursos públicos y presentó una grabación de su campaña en Michoacán y denunció también ante la PGR a ex gobernadores panistas por presuntos vínculos con el narcotráfico. La reacción a la respuesta priista fue inmediata y la molestia en Los Pinos hizo que se buscara el encuentro con Pedro Joaquín Coldwell que se reunió en privado con el presidente, en una reunión por cierto que molestó a muchos en el PRI que acusaron de “ingenuo” al dirigente de su partido “porque Calderón no cumple ningún acuerdo”.
Así que, con el enorme colmillo de sus recién cumplidos 83 y tomando la experiencia lopezobradorista de 2006 y sabedores del tono que van a tomar las campañas presidenciales, en el PRI se dicen dispuestos a no dejar pasar ni un solo golpe y a contestar como el primitivo principio jurídico que cobraba también “diente por diente”.
NOTAS INDISCRETAS… ¿Quién dejo pasar a Fernando Larrazabal a las listas del PAN y provocó un auténtico cisma el panismo de Nuevo León y de paso dejó tocado a Gustavo Madero? La pregunta empieza a responderse. El compromiso de darle al cuestionado alcalde de Monterrey el primer lugar en la lista de la Cámara de Diputados y a Raúl Gracia en el Senado fue hecho por Ernesto Cordero y su operador Rogelio Carvajal cuando buscaban votos para su fallida candidatura presidencial.
En pago a los apoyos que dio Larrazabal y su grupo a Cordero en la precampaña es que el alcalde buscó el fuero para él y su gente que, no conformes con eso, buscan ahora imponer candidatos al Congreso local y las alcaldías de Nuevo León, a pesar de los escándalos de corrupción en los que se vieron involucrados por presuntos negocios con los dueños de Casinos en el estado. La postulación ya causó la renuncia al PAN del empresario Rogelio Sada Zambrano y amenaza con más rupturas si no se cuidan las formas para seleccionar a los candidatos locales. De paso, Gustavo Madero tuvo que pagar también el costo de esa negociación de Cordero y ahora está seriamente cuestionado el dirigente nacional… Semana de crecimiento. Los dados mandan Escalera doble por un año más de vida.
@sgarciasoto