Al entrar en periodo de veda, el presidente Felipe Calderón opta por actividades públicas en el extranjero: el lunes se encontrará en Washington con Barack Obama y el 11 de abril saldrá al Caribe para visitar Cuba y reunirse en el dirigente de la isla, Raúl Castro.
Calderón tendrá un encuentro con el primer ministro de Canadá, Stephen Harper, y el mandatario de Estados Unidos. Luego se ausentará de nuestro país del 11 al 15 de abril para una gira de trabajo por Cuba y Haití, que cerrará con su participación en la VI Cumbre de las Américas en Cartagena, Colombia.
La Secretaría de Relaciones Exteriores, que solicitó a la Cámara de Senadores la autorización para el viaje presidencial no precisó la agenda en Cuba, sólo anotó que el objetivo de la gira es “profundizar el diálogo sobre los intercambios comerciales y de inversión entre las dos naciones”.
Tras las actividades en Cuba, Calderón realizará una breve visita de trabajo a Puerto Príncipe, capital de Haití, para atender la invitación que le extendió el presidente de dicho país, Michel Joseph Martelly.
Ayer, en el último día que la ley electoral le permitía hacer anuncios y entregar obras, Calderón resumió lo que, a su juicio, ha sido su gestión: “he tenido aciertos y errores, qué duda cabe, como presidente, pero sí les puedo asegurar que he tratado de ser un presidente que no roba y que hace obra”.
Durante la inauguración de un hospital regional de alta especialidad en Ixtapaluca, estado de México, Calderón insistió que su administración ha enfatizado la construcción de infraestructura y la cobertura en salud consideró muy triste que los ciudadanos tengan un concepto de los políticos que él ha trabajado para desterrar.
“En mi paso por la política he escuchado una frase muy triste, muy triste, que describe el viejo concepto de política que hay en México y que tenemos que desterrar, un concepto que entre broma y en serio la gente, con ironía, hablando de nosotros los funcionarios, los gobernantes, los presidentes, dicen: ‘que robe, pero que haga algo’”, acotó.
En la inauguración, a la que acudió el gobernador del estado de México, Eruviel Ávila, el jefe del Ejecutivo aseguró que dejó prácticamente hasta el último momento la inauguración de este hospital, el más grande que se construyó durante su administración.
Calderón recordó que inició su administración con el tema de la salud y ahora inauguró esta obra en su última gira, para la que agradeció el apoyo del gobierno estatal.
“Recuerdo que la primera visita que hice, bajo el gobierno del doctor Eruviel Ávila, fue a Jiquipilco, a inaugurar, también, un hospital ahí y a decretar la cobertura universal en salud en el estado de México, y la última sea este gran, gran hospital”, apuntó.