La audiencia que se realizaría ayer en el Juzgado 32 Penal relacionada con el secuestro y homicidio del menor Fernando Martí no pudo llevarse a cabo, luego de que los cinco testigos que estaban citados a comparecer, entre ellos el padre de la víctima, el activista Alejandro Martí, no se presentaron ni enviaron a algún representante.

 

Todos ellos habían sido notificados oficialmente  desde hace más de dos semanas sobre la realización de esta audiencia, la cual era considerada por la defensa de los seis inculpados como clave, pues se abordaría directamente el tema del plagio del menor y la negociación del rescate.

 

Por ello, los representantes legales  de una de las acusadas, la ex agente federal Lorena González, anunciaron que con apego al artículo 33 del Código de Procedimientos Penales, solicitarán que se sancione a Alejandro Martí y a los demás testigos con una multa o arresto de 36horas, y una vez que se fije una nueva fecha, se garantice mediante el uso dela fuerza pública que asistan.

 

“Es una bajeza de parte de Martí, no se puede ser candil de la calle con el activismo que realiza en pro de la justicia y oscuridad de su casa, con el asunto de su propio hijo; esta inasistencia irresponsable sólo provoca que se prolongue más la estancia de Lorena en la cárcel que ya lleva más de tres años por un delito que no cometió”, indicó Rodrigo Higuera, abogado de la acusada, en entrevista con 24 HORAS.

 

Las personas que estaban citadas a la audiencia de ayer, además de Alejandro Martí,  eran Christian Salmones, ex escolta de víctima y único sobreviviente del plagio; Carlos Emilio Gómez, yerno de Martí y quien tuvo el contacto con los plagiarios por teléfono; Aurelio Munguía Chávez, chofer que llevó el dinero, y Ernesto Mendieta Jiménez, asesor de la negociación que resultó infructuosa.

 

La diligencia estaba programada a las 10:00 de la mañana en el referido juzgado ubicado en el Reclusorio Preventivo Sur. Lorena González fue trasladada desde el penal femenil de Santa Martha para que estuviera detrás de la rejilla de prácticas, y fueron requeridos también los defensores de los otros procesados que se encuentran en penales de provincia.

 

Sin embargo, tras dos horas de espera, los únicos que se presentaron fueron los abogados defensores pero ninguno de los testigos, lo que obligó al juez Jesús Ubando López, a cancelar la comparecencia y diferirla para una nueva fecha.