El candidato presidencial de las izquierdas a la, Andrés Manuel López Obrador, dijo que no actuará de manera autoritaria, porque quiere democracia y no una dictadura para México.
Frente una plaza llena en Cholula, Puebla, López Obrador afirmó que “no habrá actos autoritarios, no se impondrá nada, vamos a respetar la libertad, porque no queremos que piensen como nosotros, esa es dictadura y nosotros queremos democracia, libertad de conciencia, religiosa”.
El candidato presidencial sostuvo que se requieren cambios en todos los órdenes de la vida pública, porque el actual modelo económico sólo ha favorecido a una minoría.
Habló de que es un “pecado social” permitir que siga la desigualdad en el país.
Al inicio de su discurso señaló que busca ver hacia adelante y por eso no dedica mucho tiempo a hablar de la experiencia de 2006, pero aseguró que de haber logrado un cambio en las pasadas elecciones, el ejemplo de desarrollo sería México y no Brasil y su ex presidente Luiz Inacio Lula Da Silva.
El tabasqueño celebró que haya gente que lo siga apoyando desde 2006 y afirmó que algunos que en los últimos años se desilusionaron, ahora ya regresaron, incluso, dijo, hay panistas y priistas que se están sumando a su proyecto.
De la misma manera que lo hizo en Tlaxcala, Andrés Manuel criticó la propuesta de sus adversarios en la carrera presidencial de privatizar Pemex. Argumentó que “cualquier mexicano con un poco de luz en la frente rechazaría la privatización de Pemex, porque el petróleo no es del gobierno, es de la Nación”.