El candidato presidencial de la coalición Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, expresó su inconformidad y rechazo al formato del debate a realizar el domingo seis de mayo y asimismo informó que ya tiene lista la denuncia que presentará ante el IFE.
Sustentó su petición en el que hecho de que, a su juicio, el formato de los debates que por ley está obligado a organizar el IFE es excesivamente restrictivo “porque así lo quieren los representantes de los otros partidos, que en realidad no quieren debatir”.
Durante su conferencia matutina, el abanderado de las izquierdas, afirmó que su adversario priista Enrique Peña Nieto ya rebasó los 330 millones de pesos que corresponden al tope de campaña y llamó al Instituto Federal Electoral (IFE) a actuar de oficio para revisar esa situación.
López obrador dijo que durante su visita a Chalco el día de ayer se percató de que el candidato de la coalición “Compromiso por México” tiene tapizado con espectaculares y propaganda los municipios del Edomex y viaja en vuelos privados durante sus giras.
El ex jefe de gobierno capitalino, dio a conocer su propuesta para lograr un crecimiento del 6% anual de la economía mexicana y la creación de siete millones de empleos a lo largo de su sexenio.
De igual forma, el político tabasqueño presentó los lineamientos de lo que sería su política de fomento a la industria en caso de ganar el 1 de julio, en la que se prevé proteger a la industria nacional frente a prácticas desleales de comercio de otros países.
Durante su conferencia, sintetizó en cinco puntos su propuesta para definir una política en el rubro que permita un crecimiento de la economía nacional de seis por ciento anual y la creación de siete millones de empleos a lo largo del sexenio.
Subrayó que juntos, gobierno e iniciativa privada, deben consensuar una política de desarrollo y fomento industrial que por parte del gobierno incluiría una reducción el precio de los energéticos, gasolina, diesel, gas y electricidad.
Adelantó que la próxima semana se reunirá con integrantes de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) para intentar convencerlos de que México asuma una agenda propia y tratar el tema de las reformas estructurales, así como la necesidad de emprender un cambio sustantivo en la actual política económica.
Sustentó su petición en el que hecho de que, a su juicio, el formato de los debates que por ley está obligado a organizar el IFE es excesivamente restrictivo “porque así lo quieren los representantes de los otros partidos, que en realidad no quieren debatir”.