BUENOS AIRES.- La presidenta argentina Cristina Fernández presentó hoy un proyecto de ley para declarar de interés público la explotación de hidrocarburos y expropiar Repsol YPF, la empresa más grande del país, controlada por capitales españoles.

 

La iniciativa, que desatará un conflicto bilateral con España, prevé que el Estado se quede con 51 por ciento de las acciones de YPF, mientras que 49 por ciento restante se dividirá entre las provincias productoras de hidrocarburos.

 

Con esta medida, Fernández pone fin a la privatización del petróleo que se aplicó en este país sudamericano desde 1991 y que establece políticas para garantizar el autoabastecimiento energético.

 

Medios locales de prensa revelaron el pasado jueves que el proyecto de ley consta de 62 artículos y establece textualmente: “declárese de utilidad pública y sujetas a expropiación el 50.11 por ciento de las acciones ‘clase D’ de la empresa YPF S.A.”.

 

La iniciativa oficial, según las fuentes, prevé que el Estado “actuará como expropiante, quedando facultado para transferir la titularidad de las acciones, una vez expropiadas, a cualquier organismo o empresa pública de propiedad del Estado Nacional”.

 

La situación de Repsol generó una fuerte incertidumbre en los últimos meses, cuando arreciaron las diferencias entre la empresa de capitales españoles y el gobierno, el cual acusa a la firma de haber incumplido con los contratos de inversión.

 

En la actualidad, 58 por ciento de YPF pertenece a la española Repsol y 26 por ciento al argentino Grupo Peterson, en tanto la propiedad del resto de las acciones es fluctuante.

 

El Estado argentino, hasta ahora, tiene una “acción de oro” que le permite participar en las reuniones y ejercer un derecho de veto en determinadas decisiones.