La violencia y la inseguridad convierten a los llamados Pueblos Mágicos en pueblos fantasma. Datos de la Secretaría de Turismo revelan que la disminución en algunos casos es de casi el 100% de turistas extranjeros y hasta del 50% para visitantes nacionales.

 

Un caso emblemático es Ciudad Mier, en Tamaulipas, donde desde 2010 comenzó el éxodo de familias hacia otras ciudades para refugiarse de la violencia.

 

Otros ejemplos de pueblos mágicos que padecen esta problemática son Taxco, Guerrero, en donde el turismo extranjero prácticamente desapareció. De acuerdo con el Sistema Nacional de Información Estadística del Sector Turismo de México-Datatur, la llegada de turistas a cuartos de hotel en esta ciudad pasó de 15 mil 980 en 2006 a ocho únicamente el año pasado.

 

Santiago, Nuevo León, padece el mismo mal. Apenas en 2011 alojó a 12 visitantes extranjeros cuando en el primer año del sexenio tenía más de mil.

 

Otro signo de los efectos de la narcoviolencia en los pueblos distintivos de México en el exterior lo padece El Fuerte, Sinaloa, que pasó de hospedar a 48 mil 311 turistas extranjeros en 2009 a 17 mil en 2011. Lo anterior significa una disminución de dos terceras partes en las visitas de extranjeros a la ciudad.

 

Estas ciudades están ubicadas en estados donde se registran altos niveles de violencia por la rivalidad entre organizaciones criminales y por enfrentamientos con las fuerzas del orden.

 

La estadística de Datatur también refleja bajas menos radicales en el número de visitantes extranjeros en otros pueblos mágicos, como Tequila, Jalisco, donde las ocupaciones por turistas foráneos bajó de mil 958 en 2008 a mil 341 el año pasado.

 

San Cristóbal de las Casas, en Chiapas, la baja fue de 60 mil visitantes extranjeros en los últimos seis años, a un promedio de mil por año. De 194 mil 443 turistas foráneos en 2006 pasó a 133 mil 039 en 2011.

 

Según datos de la PGR, en 31 de los 50 municipios donde se enclavan estos pueblos mágicos registran altos niveles de violencia por el crimen organizado.

 

Por ejemplo, Tamaulipas -donde hay dos pueblos mágicos- es disputada por el cártel del Golfo y Los Zetas. En Guerrero operan los cárteles de Sinaloa y Los Zetas; en Nuevo León Los Zetas, el cártel de Sinaloa y el del Golfo se disputan el control de rutas para el tráfico de drogas, mientras que Jalisco es sede del Cartel Jalisco Nueva Generación, bajo la orden del cártel de Sinaloa.

 

Datos de la Sectur, a partir de 2008 el turismo mexicano registró un descenso tan dramático que el producto se abarató en 15.6 por ciento. Durante 2010, los viajeros internacionales realizaron un gasto inferior del 10.7% en comparación con 2008.

 

Zonas de guerra

 

Para Luis Artorga Almanza, experto en temas de seguridad nacional, la casi extinción del turismo extranjero en los pueblos mágicos es una consecuencia más de la narcoviolencia y de la impunidad que prevalece en algunas ciudades del país, con mayor presencia de grupos criminales.

 

“Sin duda que la narcoviolencia le tiene que pegar también al turismo, porque para las organizaciones del narcotráfico, grandes y pequeñas, no importa si una ciudad sea emblemática, pueblo mágico o patrimonio de la humanidad, mientras vean en ella una oportunidad ventajosa para hacer negocios muy lucrativos”, dijo.

 

El catedrático de la UNAM consideró que las autoridades deberán poner mayor atención en estos sitios mágicos, a fin de volver a reactivar el turismo, pues de lo contrario, advirtió, en el corto plazo podrían desparecer.

 

“Si el turismo no acude a estos pueblos mágicos, si la misma población decide irse de estos lugares, pues tarde o temprano desaparecerán las certificaciones y, por ende, los apoyos, por lo que estas ciudades serán lo que muchas otras, o sea, tierra de nadie”, aseveró.

 

El pueblo fantasma

 

En 2007, Ciudad Mier obtuvo la distinción de Pueblo Mágico. Y como no si en ese entonces tenía una atmósfera acogedora y tranquila, en cuyas calles se conjugaban la historia, arquitectura, gastronomía y los espléndidos parajes de caza y pesca. De hecho, para 2008, este municipio se posicionó en el primer lugar de los Pueblos Mágicos que había en el país, según los indicadores de Evaluación de Desempeño de la Secretaria de Turismo.

 

Sin embargo, todo cambió a partir del 5 de noviembre de 2010. La muerte en Matamoros de Antonio Ezequiel Cárdenas Guillén, Tony Tormenta, líder del Cártel del Golfo, a manos del Ejército, desató una guerra sin cuartel por la plaza con Los Zetas.

 

Una semana después, el éxodo de habitantes comenzó luego de que integrantes de Los Zetas difundieran, mediante llamadas telefónicas, que sus habitantes debían salir de la zona o serían arrasados, al igual que sus viviendas.

 

Ese mes, de 6 mil 700 habitantes, Mier era habitado únicamente por unas 900 personas, según fuentes militares.

 

La disputa de este pueblo mágico se debe a que es paso natural para el contrabando de drogas a Texas.

 

La excepción

 

De los datos entregados por la Secretaría de Turismo destaca que Valle de Bravo, en el Estado de México, se registra un efecto contrario, pues en los últimos seis años triplicó el alojamiento de turistas extranjeros. Según los datos, en 2006 recibió a mil 009 y para 2011 fueron 3 mil 083 visitantes no residentes.

 

EL DATO

 

Entre diciembre de 2006 y septiembre de 2011, en los 54 pueblos mágicos han ocurrido más de 700 asesinatos, de acuerdo con cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública y de la PGR.

 

Violencia “mágica”

 

Taxco, Guerrero

 

Conocido por sus minas de plata y construcciones coloniales.

 

Entre diciembre de 2006 y septiembre de 2011 ocurrieron 133 muertes violentas.

 

El 29 de mayo de 2010 fue hallada una fosa clandestina con 55 cuerpos.

Ciudad Mier, Tamaulipas

 

Su arquitectura del siglo XIX y su gastronomía lo convirtieron en el pueblo más visitado del país en 2008.

 

En noviembre de 2010 sus pobladores lo abandonaron para ponerse a salvo de la violencia. Ese año cerró con 93 muertos.
El Fuerte, Sinaloa

 

Su principal atractivo es el Carnaval que precede la Semana Santa.

 

En este lugar suman casi 100 muertes en el presente sexenio.
Santiago, Nuevo León

 

Se caracteriza por su pintoresco paisaje, sus bellezas arquitectónicas, sus múltiples rincones y parajes naturales.

 

En los últimos años ha sido escenario de enfrentamientos, ejecuciones y detenciones. Por ejemplo, el 28 de julio de 2011, los restos de un hombre mutilado fueron hallados en la plaza principal de este municipio.

 

Tequila, Jalisco

 

Sede de la Fiesta Nacional del Tequila, del 29 de noviembre al 13 de diciembre, una de sus principales actividades para el turismo.

 

Centro de disputa entre grupos criminales, Junto con Guadalajara, Zapopan, Villa Purificación, La Barca, Tlajomulo, Teuchitlán, Yahuala; de Los Altos a la Costa, es está considerado dentro del Triángulo de las Bermudas, donde se han registrado múltiples desapariciones.

 

Pátzcuaro, Michoacán

 

Zona lacustre de Michoacán de calles empedradas, comercios con fachadas blancas y rojas, y donde pervive la cocina prehispánica.

 

Es el cuarto municipio más violento. Cada año los muertos superan la veintena.

 

San Cristóbal de las Casa, Chiapas

 

Es una de las más bellas y originales de la región de los Altos de Chiapas, aspecto al que hay que agregar la evocadora imagen colonial que ha conservado al paso de los siglos.

 

En los últimos años han ido en aumento los secuestros y los robos con violencia. Además de aumentar la presencia de grupos dedicados al tráfico de personas.

 

Valle de Bravo, Estado de México.

 

De clima subhúmedo con lluvias en verano, es un pequeño poblado urbano con muchísimos recursos que lo hacen atractivo a los visitantes que buscan el placer, el descanso y la aventura.

 

De los primeros pueblos mágicos en los que se ha documentado la situación del turismo, aquí no ha habido hechos violentos de relevancia.