Los incendios y asentamientos irregulares son, desde hace varios años una amenaza constante para la reserva natural del bosque de La Primavera, que rodea parte de la zona metropolitana de Guadalajara, Jalisco. La conflagración que inició el sábado pasado devastó hasta ayer siete mil 523  de las 30 mil 500 hectáreas que comprende la zona.

 

Álvaro García Chávez, secretario de Desarrollo Rural de Jalisco, dijo a 24 HORAS que la invasión del bosque se incrementa anualmente, después de incendios como el que se registra en el lugar desde el mediodía del pasado 21 de abril.

 

“Cada año, en algunos puntos muy particulares donde la mancha urbana está pegada al cinturón del bosque de La Primavera hay algunos asentamientos irregulares, que presentan un avance significativo. Ahí existe mucho vandalismo y existe el interés particular de mucha gente que no tiene donde vivir, y que seguramente piensan que una vez que sea rehabilitado podrán utilizar o pelear la legalidad de los terrenos”, manifestó García Chávez.

 

Tan sólo en lo que va del año se han reportado 14 incendios ubicados en la zona norte-oriente, la misma donde inició el siniestro de los últimos días.

 

El fuego comenzó en este punto porque los habitantes del lugar quemaron basura en un tiradero clandestino, que se salió de control, situación que se agravó cuando se presentó otro incendio en el paraje de Agua Dulce, ubicado en la parte poniente del parque.

 

Hasta ayer se había controlado únicamente 65% del incendio, que ya había arrasado con una quinta parte de las 30 mil 500 hectáreas que conforman este bosque.

 

Debido al siniestro, autoridades educativas del estado suspendieron clases en 10 escuelas de la zona metropolitana de Guadalajara y aledañas al área afectada.

 

Tanto el funcionario como Víctor Busteros, coordinador  del grupo local de Greenpeace, coincidieron en que existen fuertes intereses de inmobiliarias para cambiar el uso de suelo del bosque y comenzar a construir viviendas de interés social, por lo cual se cree que los incendios fueron provocados.

 

“Todo indica que es lo más factible”, afirmó el secretario, mientras que Busteros aseguró que “los brigadistas coinciden en que son provocados, por la forma en que se han comportado y los puntos donde se dieron”.

 

El lunes pasado, personal que ayuda en el combate al fuego fueron atacados por un grupo de hombres armados. “El primer reporte era que pueden ser algunos vándalos, pero hubo un lugar en donde incluso se les impidió el acceso y les mostraron las armas”, dijo García Chávez.

 

De acuerdo con la Comisión Natural de Áreas Protegidas, dependiente de la Secretaría del Medio Ambiente y Recurso Naturales (Semarnat), en La Primavera sólo habitan 76 personas, sin embargo, las autoridades locales han encontrado asentamientos irregulares, venta de tierras y hasta la presencia del crimen organizado.

 

En 2007, los ejidatarios interpusieron y ganaron la desincorporación de 552 hectáreas, que vendieron a los desarrolladores inmobiliarios. En tanto, el año pasado durante las labores para apagar otro incendio fue hallado un narcolaboratorio en el centro del bosque.

 

Aun con esto, el estado no ha podido controlar los incendios que cada año se dan en todo su territorio, lo que ubica a la entidad en el quinto lugar a nivel nacional con más incidentes de este tipo.

 

En 2008 los incendios duraban, en promedio, una hora 45 minutos, mientras que para 2009 la duración se incrementó a poco más de ocho horas. En esta ocasión, el fuego en La Primavera lleva ya más de 84 horas.

 

Ante las repeticiones de estos percances, sobre todo en el bosque urbano, el secretario de Desarrollo Rural del estado aseguró que la procuraduría estatal y la del Medio Ambiente comenzarán las indagaciones para encontrar a los responsables.