Gabriel Quadri regresó a su alma mater, la Universidad Iberoamericana, y entre risas, debate con los alumnos, y aplausos, defendió su campaña proselitista al señalar que la participación de los partidos pequeños en una contienda electoral permite engrandecer la democracia y evitar un oligopolio.
En un auditorio José Sánchez Villaseñor, de 600 asientos, lleno, aunque sin desbordarse como ocurrió con la visita de Andrés Manuel López Obrador, un estudiante preguntó a Quadri si no sería más benéfico para el país destinar recursos a asuntos prioritarios que a la campaña de un candidato que no tiene posibilidades de ganar.
El candidato aliancista expresó “Zas”, y contestó que de no existir financiamiento a los partidos pequeños cabría la posible de que se infiltrar infiltrara dinero no transparente e incluso del crimen organizado a los partidos, además de que su campaña “sólo” cuesta 100 millones de pesos.
Sostuvo que desde una visión fatalista se podría creer que sólo uno de los candidatos tiene seguro el triunfo y entonces “los otros tres tendríamos que salirnos de la contienda electoral y esa no es la visión que debemos tener”.
Quadri invitó a los asistentes a reírse antes de que le preguntaran sobre su relación con la maestra Elba Esther Gordillo, líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación. “Ya sé que se ríen todos, vamos, ríanse, está bien, no tiene nada que ver conmigo, no tiene nada que ver con mi campaña, yo no soy el SNTE”. Cuando se le hizo la pregunta comentó que sólo ha convivido una vez con ella, en su casa, durante un desayuno.
En el encuentro estudiantil, donde uno de los estudiantes de la carrera de diseño le externó su apoyo, el candidato aceptó no tener tacto político pero se dijo dispuesto a aprenderlo y convertirse en un excelente político como los que hay en el “PRI, PAN y las izquierdas”, con lo que provocó nuevas risas por parte de los universitarios.
En cuanto a su postura por la aplicación de la Evaluación universal al magisterio, dijo que está a favor de que se realice y resaltó la necesidad de un debate sobre el tema entre la líder del SNTE y el Secretario de Educación, José Ángel Córdova Villalobos, a quien en una entrevista radiofónica calificó “con todo respeto” de improvisado, ya que no tiene experiencia en el tema aunque “ha sido un extraordinario secretario de Salud”.
Dijo que tanto el secretario de Educación como el presidente Felipe Calderón, deben dar la cara y no mandar por comunicados su postura “nos deben una explicación” o de lo contrario la Evaluación universal a los maestros parecería “un gran show electoral”.