El pleno de la Cámara de Diputados aprobó diversas modificaciones a las leyes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y del ISSSTE para que los cónyuges de parejas del mismo sexo sean beneficiados con la seguridad social.
La reforma, que quedó pendiente de la sesión del viernes pasado, fue aprobada en la sesión de este lunes con 252 votos a favor, 80 en contra y 15 abstenciones, por lo que fue devuelta al Senado de la República para los efectos constitucionales correspondientes.
En la argumentación, la diputada Enoé Margarita Uranga Muñoz, secretaria de la Comisión de Derechos Humanos, explicó que se trata de cambios legales que responden al principio de igualdad consagrado en la Constitución en el marco de derecho internacional de las garantías individuales.
Con ello se ratifica el federalismo de México y se pretende revertir una injusticia cometida contra una parte de la población a la que se le niega protección y beneficios derivados de su derecho laboral.
Como derecho humano, el acceso a la seguridad social es universal, por lo que es insostenible la discriminación basada en un estigma.
También sostuvo que es falso que por aprobar esa ley exista un detrimento en las finanzas, ya que la cuota obrero-patronal que se aporta a la seguridad social es independiente de la preferencia sexual y sería no solamente falaz, sino risible suponer que sale más cara una pareja del mismo sexo y más barata una de distinto género.
Refirió que la Organización de las Naciones Unidas ha mandatado que los derechos humanos, en particular el de la salud, no podrán ser negados por una argumentación de costos al erario.
La no discriminación es transversal a los derechos humanos sustantivos justamente como el de la seguridad social para todas las personas, por lo que el Estado laico no puede castigar con la privación de derechos a personas porque sus amores y sus hogares desatienden los decretos de alguna creencia en particular.
Probado en el mundo desarrollado, está que el reconocimiento jurídico de los distintos arreglos familiares que subsisten en la sociedad mejora la calidad de las políticas públicas y del desarrollo social, reasltó Uranga Muñoz, quien mencionó que los 10 países más desarrollados del mundo reconocen todos los tipos de familia.
Planteó además que el derecho a la seguridad social está comprometido internacionalmente por México y sus componentes son, sin duda, necesarios para edificar el proyecto de vida familiar de todas y de todos.
México firmó lo anterior en el Programa de Acción de la Conferencia Internacional de Población y Desarrollo, en El Cairo y en Beijing, entre otros tratados más, refirió la legisladora del Partido de la Revolución Democrática.
Enoé Uranga recordó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió a favor del reconocimiento de las familias diversas e hizo énfasis en el de las sociedades de convivencia del Distrito Federal.
También de los pactos civiles de solidaridad en Coahuila, y por ello este tema es un asunto del federalismo, de respetar las instituciones que cada una de las entidades soberanamente se quieren dar, como lo han determinado Coahuila, Quintana Roo y el Distrito Federal, y al Congreso de la Unión le toca defender ese espíritu federalista.