MADRID. Miles de personas se manifestaron en ciudades de toda España en defensa de la salud y la educación, y para expresar su rechazo a los planes del Gobierno de ahorrar 10 mil millones de euros en ambos servicios públicos para cumplir los objetivos de reducción del déficit.

 

Las organizaciones sociales convocantes de las protestas, bajo el lema “Con la Salud y la Educación no se juega”, exigieron al término de la manifestación en Madrid “otra manera de salir de la crisis” frente a los ajustes aplicados por el Gobierno.

 

España atraviesa una grave crisis económica, con un desempleo galopante que afecta ya a uno de cada cuatro trabajadores.

 

De acuerdo con la última Encuesta de Población Activa (EPA), difundida el pasado viernes, en los tres primeros meses de 2012, 374 mil 300 personas, se quedaron sin empleo. Lo que significa que el número total de desempleados en España es de 5 millones, 639 mil 500, el 24.44% de la población económicamente activa.

 

El Gobierno de Mariano Rajoy, del conservador Partido Popular (PP), aprobó unos austeros presupuestos para 2012 que incluyen un objetivo de déficit público de un 5.3% del PIB, en el horizonte de dejarlo en 2013 en el 3%, como exige el Pacto de Estabilidad de la Unión Europea.

 

Además, en Madrid, la Plataforma Social en Defensa del Estado de Bienestar y los Servicios Públicos, que agrupa a medio centenar de organizaciones sociales, entre ellas los sindicatos mayoritarios, Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores (UGT) también convocaron protestas en decenas de ciudades de España.

 

En una rueda de prensa previa a la manifestación en Madrid, el secretario general de UGT, Cándido Ménez, aseguró que, con las últimas medidas anunciadas, el ministro español de Economía, Luis de Guindos, “cuenta cuentos porque no le van a salir las cuentas”.

 

El secretario general de Comisiones Obreras, Ignacio Fernández Toxo, calificó de “misión imposible” el objetivo de déficit marcado por el Gobierno para 2013, y consideró que este supondría una renuncia expresa al modelo económico y social.

 

También participó en la protesta en Madrid el líder de la coalición Izquierda Unida (IU), Cayo Lara, quien acusó al Gobierno de Mariano Rajoy de “robar el derecho constitucional” a la salud y a la educación y convertir los servicios sociales “en un negocio”.

 

A su juicio, existe una “salida diferente” para corregir el déficit público y propuso la “lucha” contra el “inmenso fraude fiscal” que hay en España y la creación de un impuesto de transacción para los “causantes de la crisis, que todavía no han aportado un solo euro”.

 

Por su parte, el presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, que clausuró el congreso de su partido en Madrid, aseguró que las reformas “sin parangón (comparación)” que está adoptando su Ejecutivo son imprescindibles para “reescribir la historia” de la prosperidad de España.

 

Entre las nuevas medidas anunciadas este viernes por su Gobierno figura la subida en 2013 del IVA y los impuestos especiales, para recaudar 8 mil millones adicionales de euros.