La poeta y cantautora estadounidense Patti Smith hizo vibrar anoche el Museo Diego Rivera Anahuacalli, en esta ciudad, donde ofreció un recital lleno de rock, poesía y energía, que incluyó un tema dedicado al artista plástico mexicano Diego Rivera.
Como parte del 28 Festival de México (fmx), que se realiza del 2 al 20 de mayo, Smith, quien se dio tiempo para saludar y destacar el gran público ante el cual estaba, reunió a unas tres mil 200 personas que disfrutaron de su talento vocal.
Gente joven, adulta y de edad avanzada ovacionaba a cada momento a la intérprete estadounidense, no solamente por su gran voz, sino también por la letra de sus canciones, que contienen poesía de libertad, amor y lucha, algunas escritas hace varias décadas y otras más recientes.
Acompañada por su banda, conformada por Lenny Kaye, voz y guitarra; Jay Dee Daugherty, batería; Tony Shanahan, bajo, teclados y voz y Jack Petruzelli, guitarra y voz; Patti Smith dejó ver en el entarimado su gran pasión por la música, pues derrochó desde su primera interpretación una energía desbordante que contagió a la concurrencia.
Un ambiente que se volvió caluroso, luego de la lluvia que cayó, se sintió en el espacio museístico, de principio a fin, pues el público se prendía cada vez más al escuchar a Smith o al verla tocar la guitarra de una manera espléndida que permitía que los asistentes se unieran con ella en algunas canciones.
Con dos pantallas gigantes, colocadas a los costados del escenario, Patti Smith inició el concierto con temas como “Dancing Barefoot”, “We three” y “Ghost dance”, ésta última dedicada a Diego Rivera, que fue fuertemente ovacionada por los asistentes.
Además de “Come back”, “The people have the power”, “Gloria”, “Wing” y “Because the night”, con las cuales se despidió del público, aunque como en todo concierto la gente solicitó una más, por lo cual la cantante ofreció un “encore” titulado “Rock and roll nigga”, que estremeció a la multitud en una velada inolvidable.
Patti Smith, conocida por fusionar la poesía y el rock, ha producido junto con su banda más de ocho disco, entre ellos, “Horse”, “Radio Ethiopia”, “Easter”, “Wave”, “Dream of life”, “Gone Again”, “Peace and Noise” y “Gung Ho”.
Desde 2007, Smith forma parte del Salón de la fama del rock and roll en Estados Unidos; en 2005 le fue otorgado el título de “Commandeur de I´Ordre des Arts et des Lettres”, del Ministerio de Cultura francés y fue reconocida por el ASCAP con el premio “Founders Award”, por su trayectoria.