El papa Benedicto XVI aceptó la renuncia del obispo Onésimo Cepeda Silva al gobierno pastoral de la Diócesis de Ecatepec, Estado de México, anunció la Secretaría General de la Conferencia del Episcopado Mexicano.
En conferencia de prensa, Cepeda señaló estar muy contento de llegar al final de sus días como obispo de Ecatepec, por lo que ya no estará sufriendo por saber cuándo se va: “Quiero decirles que estoy contento, creo que hice mi mayor esfuerzo, si me equivoqué, pido una disculpa con todo amor a mi clero de Ecatepec”.
Al despedirse también de los integrantes de la prensa, con quien señaló haber tenido algunas diferencias, les pidió seguir proclamando la verdad ante la política y la Iglesia, ya que la verdad hace libres a los hombres. “Les agradezco que hayan proclamado la verdad, a los que calumniaron y mintieron los perdono, su trabajo es hacer un poco de escándalo, yo siempre dije que a periodicazos se matan a las moscas y gracia a Dios sigo vivo”.
El ahora obispo emérito resaltó que aun cuando ya no está en la diócesis continuará predicando a Cristo porque sigue teniendo esa jerarquía: “Me dejaron como ejidatario sin parcela, pero sigo siendo ejidatario”.
El Código de Derecho Canónico que rige a la Iglesia católica establece que todos los obispos deben renunciar a los 75 años, por ello y al haber cumplido el pasado 25 de marzo la edad de jubilación obligatoria, Onésimo Cepeda presentó su renuncia.
Eso significa que a partir de esta fecha la Diócesis de Ecatepec queda sin titular y al frente de ella estará el asesor de los presbíteros encargados de la titularidad mientras se nombra al sucesor.
La noticia fue publicada en L’Osservatore Romano a 44 días de que el obispo mexicano presentara su renuncia al Vaticano, y cuando estaban por cumplirse 17 años de que Onésimo estaba al frente de la diócesis, que ocupó desde el 28 de junio de 1995.
BANQUERO Y AGENTE
El mitrado cursó la carrera de derecho en la Universidad Nacional Autónoma de México y obtuvo el título de abogado en 1960; ingresó al Seminario en 1961 a los 24 años de edad y fue ordenado sacerdote en el estado de Morelos, en 1970; más tarde se convirtió en rector del Seminario Conciliar de San José en Cuernavaca, y en 1995 el papa Juan Pablo II lo nombró obispo.
Estuvo encargado de la relación Iglesia-Estado de 1971 a 1995, cuando se realizaron las tres visitas pastorales del papa Juan Pablo II a México, y cuando ocurrió el asesinato del cardenal Posadas Ocampo, en el aeropuerto de Guadalajara, el 24 de mayo de 1993, siendo nuncio apostólico Girolamo Prigione y procurador General de la República Jorge Carpizo.
El primero obispo de dicha diócesis se desempeñó como banquero y corredor de bolsa, trabajó con Roberto Hernández, presidente de Grupo Financiero Banamex, y más tarde fue director ejecutivo de Banamex Citigroup, Ingenieros Civiles Asociados (ICA) y en Televisa, así como otras empresas.
Amante del golf y los autos deportivos, Cepeda congregaba cada año a empresarios y funcionarios públicos en su cumpleaños; uno de los asiduos a esos festejos es Carlos Slim, propietario de Telmex y Telcel, a quien conoció en 1964 y con quien fundó la Casa de Bolsa Inversora Bursátil, que más tarde se constituyó en Grupo Financiero Inbursa, y cuyo hijo Carlos casó en 2010.
1999: Inaugura la catedral de Ecatepec, que se construyó en menos de dos años y tiene capacidad para cuatro mil personas.
2010: Fue exonerado de una acusación por fraude, se le acusaba de simular un préstamo para quedarse con una colección de cuadros de José Clemente Orozco, Rufino Tamayo, Diego Rivera, Frida Kahlo, Joaquín Sorolla y Marc Chagall, entre otros.
2011: Dio su respaldo a Jorge Hank Rhon, detenido en Tijuana por acopio de armas y dijo esperar “que se restablezca la verdad”