ATENAS. Al cierre de la edición, el presidente de Grecia, Carolos Papulias, continuaba la ronda de contactos con líderes políticos para tratar de forjar una alianza de Gobierno, unas negociaciones que hasta el momento no han arrojado un resultado que evite la convocatoria de nuevos comicios.

 

La reunión entre Papulias, y los líderes de los tres principales partidos terminó sin un resultado concreto sobre la formación de un Gobierno de coalición, sin embargo todos los representantes dieron a conocer que continuarán con el compromiso de seguir negociando.

 

El líder de la Coalición de Izquierda Radical (Syriza), Alexis Tsipras, reiteró que no participará en un Gobierno de coalición con socialdemócratas y conservadores y avisó de que no cederá a sus “chantajes”.

 

“Los partidos de la coalición han gobernado Grecia en los últimos dos años y aún continúan chantajeando al pueblo. Pero los griegos no pueden ser chantajeados”, advirtió Tsipras en referencia al socialdemócrata Pasok y al conservador Nueva Democracia (ND), que han dirigido el país en los últimos meses.

 

El líder izquierdista dijo en rueda de prensa que no será “cómplice” del “crimen” de estos partidos, en referencia a los compromisos de austeridad adquiridos por Pasok y ND con la UE y a los que se opone Syriza.

 

Syriza ha manifestado en varias ocasiones que de llegar al poder se encargará de sacar de circulación al euro para regresar al dracma.

 

Por su parte, el líder conservador Andonis Samarás insistió en que la culpa de no poder formar Gobierno es de Syriza.
“He hecho todos los esfuerzos para crear un Gobierno de unidad. Syriza no está de acuerdo en darle su apoyo”, afirmó Samarás a los periodistas, poco después de la reunión que mantuvieron el presidente Carolos Paulias y los líderes de los tres partidos más votados en las elecciones del pasado domingo.

 

 
Hasta el momento, Nueva Democracia, Pasok y el partido de centro-izquierda Dimar llegaron a un principio de acuerdo para formar un gabinete que mantenga al país en la eurozona y renegocie los compromisos de austeridad con la Unión Europea.
Pero esos partidos consideran imprescindible que Syriza, segunda fuerza más votada en Grecia en las elecciones del domingo pasado, se involucre en el Gobierno.

 

 

Por su parte, Venizelos aseguró en rueda de prensa que su formación sigue una línea “responsable” y “nacional” y acusó a los otros partidos de buscar la celebración de nuevas elecciones anticipadas.

 

 

El ex ministro de Finanzas Venizelos lamentó que durante el encuentro nadie fue capaz de plantear un paquete de propuestas más concretas de las ya existentes para conformar una alianza de Gobierno.

 

 

“Tsipras nos dice que Nueva Democracia, Pasok y Dimar tienen 168 diputados (la mayoría absoluta son 151) y que Syriza puede quedarse en la oposición. Pero esto es una cuestión de responsabilidad nacional”, advirtió.

 

Por la noche, el jefe del Estado recibió al líder del derechista Griegos Independientes, Panos Kammenos, quien a la salida del encuentro mostró su disposición a formar parte de una alianza de Gobierno si se rechaza el compromiso contraído con la Unión Europea y las exigencias de reparaciones de guerra a Alemania, entre otras condiciones.

 
Por su parte, la dirigente del Partido Comunista, Aleka Papariga, calificó de “teatro” la ronda de contactos y consideró que el país se encamina hacia nuevas elecciones.

 

 

Además, anunció que su partido propondrá en el Parlamento una moción para denunciar el acuerdo con la UE.