Chicago. Dos personas fueron acusadas hoy de planear la fabricación de explosivos para atentar durante la cumbre de la OTAN en Chicago, aunque sin nexos con tres individuos arrestados el miércoles en el vecindario de Bridgeport.
Sebastian Senakiewicz, de 24 años, fue arrestado el jueves por la tarde en su casa del norte de la ciudad, y Marcos Neiweem, de 28 años, en su domicilio ubicado en el barrio de Pilsen, informaron las autoridades.
Durante una audiencia en corte, se les dictó a los jóvenes fianzas por 750 mil a Senakiewicz y 500 mil dólares a Neiweem.
Según informes de la policía de Chicago, Senakiewicz, un mecánico que se identifica como anarquista, conspiraba con más de dos individuos para elaborar explosivos que iban a ser utilizados durante la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Neiweem, acusado de intento de posesión de artefactos explosivos o incendiarios, se habría reunido con un sujeto que le proporcionó una lista de ingredientes para preparar explosivos, y escrito una lista y mensajes de texto con el mismo contenido.
La abogada de Senakiewicz, Molly Armour, calificó de “cargos sensacionalistas” las acusaciones contra el joven, y Steven Saltzman, defensor de Neiweem, protestó porque su cliente estuvo bajo custodia durante 66 horas antes de ser acusado, violando el plazo legal.
Ambos tienen antecedentes penales menores, ya que Neiweem está en libertad condicional por golpear a un oficial de policía de Chicago en 2010, y Senakiewicz se declaró culpable en septiembre de 2008 de manejar alcoholizado, pagó fianza y estuvo cuatro meses bajo supervisión de la corte.
El miércoles pasado, tres activistas foráneos fueron arrestados en una redada policial a un edificio de departamentos, acusados de conspiración.
Los tres detenidos fueron acusados de planear colocar un explosivo en la sede de campaña del presidente Obama, la casa del alcalde Rham Emanuel y cuatro estaciones de policía, además de elaborar bombas molotov y poseer un dispositivo incendiario.
Marchas contra la OTAN dejan un activista herido
Una manifestación antimilitar reunió hoy a miles de personas que marcharon por las calles de Chicago en medio de un fuerte dispositivo de seguridad, y concluyó con un enfrentamiento entre un grupo radical y oficiales de la policía.
La concentración inició a las 10:00 hora local (15:00 GMT) en el Grant Park, con música y más de 40 oradores, bajo vigilancia de un nutrido contingente policial, y a las 14:00 local (19:00 GMT), 50 veteranos de las guerras de Irak y Afganistán iniciaron la marcha.
Después de avanzar por una calle del centro, tal como habían acordado la ruta con el municipio, los manifestantes se dirigieron por la avenida Michigan hasta llegar a la cercanía del McCormick Place.
La manifestación fue en repudio al inicio este día de la Cumbre de 28 países miembros y 22 invitados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
La extensa marcha llevaba escoltas cerradas de policías locales por ambos lados, que no alcanzaron a cubrir todos los contingentes formados por grupos pacifistas, ambientales, laborales, religiosos, comunitarios, integrantes de diferentes “ocupaciones”, entre otros.
Todos gritaban consignas, cantaban canciones modificadas y agitaban carteles con leyendas diversas.
Dos horas después, al llegar al sitio permitido por la autoridad, los veteranos llevaron a cabo su simbólico rechazo de las medallas obtenidas y durante un mitin de aproximadamente una hora argumentaron su inconformidad por la cumbre OTAN.
Cuando la gente empezó a retirarse y tomó calles aledañas en busca de transporte, cientos de policías de diferentes corporaciones aguardaban en ellas. Un grupo de jóvenes identificados como anarquistas se concentró varias calles atrás del mitin e inesperadamente regresó al sitio corriendo.
Los manifestantes tiraron una valla metálica, lanzaron botellas y basura a los oficiales, quienes hicieron una barrera con sus bastones y empujaron a sus agresores.
Más elementos de la agrupación antidisturbios reforzaron el sitio y minutos más tarde el saldo era de sólo un activista herido.
Sin embargo, los grupos de activistas aún tienen planeado seguir en el centro de la ciudad y volver a salir mañana lunes con la misma táctica de pequeñas concentraciones y marchas sin destino fijo para desesperar a los oficiales.
Esto antes de llevar a cabo el último de sus actos programados en la “Semana sin Capitalismo”, que consiste en un mitin de protesta frente a las oficinas de la aeronáutica Boeing, por su apoyo a las guerras.