Las declaraciones realizadas el 9 de mayo, por el presidente Barack Obama a la cadena ABC en torno a su apoyo al matrimonio entre parejas homosexuales, ha marcado un parteaguas dentro de la lucha de los derechos civiles de grupos considerados como minoritarios en Estados Unidos en plena etapa de elecciones presidenciales.
Esta decisión, que ha llegado a ser considerada como una mera estrategia política, podría tener un gran impacto en la cerrada elección que se prevé sostendrá el mandatario en noviembre ante el probable candidato republicano, Mitt Romney.
Con respecto a su reciente postura a favor de los matrimonios homosexuales, Obama señaló en el programa The View de ABC que es “difícil de decir” si su recién expresado apoyo al matrimonio homosexual dañará su reelección. Sin embargo, agregó que hay una gran diferencia entre él y el candidato republicano Romney sobre esta cuestión, pero que al final sería la economía la que determinará el resultado de la elección.
Y es que muchos todavía piensan que la suerte del presidente se juega en los temas económicos, más que en el apoyo o rechazo por parte de demócratas y republicanos al matrimonio homosexual.
“En realidad el presidente y los demócratas pueden hablar todo lo que ellos quieran” dijo el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, “pero el hecho es que el pueblo estadunidense está enfocado en los temas de la economía y la pregunta que hacen es muy simple: ¿dónde están las fuentes de trabajo?”
Precisamente, una mejora de la economía es lo que el presidente necesita para asegurar su reelección, dice el analista del Instituto Brookings, Thomas Mann.
“Los sueldos están estancados, el desempleo alto y la gente bastante desanimada sobre el estado de la economía”, dice Mann.
Sin embargo aún cuando la economía es un elemento crucial no se puede dejar de lado la creciente polémica que se ha generado en torno a las declaraciones de Obama.
Las reacciones no se han hecho esperar y han salido inmediatamente famosos como George Clooney, Eva Longoria o Ricky Martin apoyando abiertamente la decisión del presidente. En una jornada de recaudación de fondos realizada en Nueva York por el cantante puertorriqueño, los partidarios de Obama aplaudieron su apoyo a la comunidad gay.
En el evento, que se desarrolló en el Museo de Arte Rubin, en Manhattan, Ricky Martin dijo: “Nosotros admiramos su coraje, como el coraje mostrado la semana pasada para afirmar que cree en la igualdad para casarse”.
Mientras tanto el presunto nominado republicano Mitt Romney se refirió al tema en un ambiente diferente, al hablar en la conservadora Universidad Liberty, en Virginiade, de orientación cristiana, reiteró enfáticamente que “el matrimonio es la relación entre un hombre y una mujer”.
El encuestador de Gallup, Frank Newport dice que el tema podría beneficiar a Romney alentando el voto de los conservadores, “pero es demasiado temprano aún para decir si esto podría cambiar la decisión de los votantes de centro”.
Entre los que reaccionaron negativamente al posicionamiento de Obama se suman su consejero espiritual, el pastor evangélico Joel Hunter, quien mencionó que estaba muy “decepcionado” por la decisión del presidente.
Algunos sostienen que esta medida va a restarle el apoyo de la comunidad latina a Obama, siendo ésta una población en rápido crecimiento, cuyos votos pueden decidir la carrera en los estados más disputados.
Empero, han sido los jóvenes de la comunidad latina los que han dado un mayor apoyo a la nueva decisión de Obama, jóvenes que a la par promueven una reforma migratoria, como la Dream Act, que permitiría que jóvenes inmigrantes sin papeles pudieran acceder a la educación superior.
La mayoría de los activistas latinos se han manifestado en apoyo al anuncio de Obama, mostrando de manera evidente el apoyo a otros grupos minoritario como ellos dentro de Estados Unidos.
Esto podría mostrar que la idea de que los hispanos son predominantemente conservadores es falsa, aunque es importante evidenciar que los latinos más conservadores, en especial los cristianos evangélicos, se oponen fuertemente al matrimonio gay. Como muestra de ello es importante señalar que la mayoría de los latinos votaron en contra del matrimonio gay en California.
A pesar de ello la mayoría está a favor de una mayor protección de los derechos civiles y de los grupos minoritarios dentro de la sociedad estadunidense y la cuestión de los matrimonios del mismo sexo no es una excepción. La mayoría de los votantes latinos están a favor de la legalización del matrimonio del mismo sexo.
Clarissa Martínez, directora de Participación Ciudadana en el Consejo Nacional de La Raza (NCLR), considera que la postura en relación a los matrimonios homosexuales va a aumentar el atractivo de Obama entre los latinos.
Los votantes jóvenes latinos han creado una alianza con activistas gays para empujar una reforma migratoria, apoyándose mutuamente. Juan Rodríguez, que milita en la Coalición de Inmigrantes de Florida, dijo a Associated Press que los derechos de los homosexuales y los movimientos de derechos de los inmigrantes son “muy alineados y se acentúa cada año”.
Los analistas del voto latino también mencionan que lo más importante en estas elecciones será la postura del presidente sobre la creación de empleos y el empuje a una reforma migratoria integral.
“Para un gran segmento de la comunidad latina, los temas de inmigración, probablemente tendrá un mayor impacto en la elección que el apoyo de Obama para la igualdad en el matrimonio”, dijo Andrea Duque, una bloguera latina y activista de los derechos LGBT.
Lo que podría ayudar a Obama para ser respaldado abiertamente por la comunidad latina en estas elecciones sería la puesta en marcha del Dream Act, reforma que su contendiente Mitt Romney ha tenido dificultades para abordar y se ha alineado con las voces anti-inmigrantes en su partido.
Al final es difícil asegurar hacia donde se inclinará más la balanza ¿será hacia la economía, el matrimonio homosexual, o la reforma migratoria?
Una respuesta a priori a esta interrogante que se centre meramente en cualquiera de una de estas tres opciones, no podría ser válida ya que todas están interrelacionadas y sólo queda esperar que las mismas condiciones políticas, económicas y sociales en Estados Unidos en los próximos meses orienten el voto definitivo y en específico el del electorado latino en la recta final de las elecciones.
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