ROMA.- El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, descartó hoy que el Papa Benedicto XVI considere renunciar a su puesto por el “vatileaks”, la crisis provocada por la filtración de documentos reservados sustraídos del apartamento papal.
“No existen elementos relevantes o significativos sobre esta situación, más allá de las elucubraciones de personas con sus propios pensamientos”, dijo refiriéndose a algunos periodistas italianos que han barajado una posible dimisión del obispo de Roma.
En un encuentro con la prensa en la oficina de información de la Sede Apostólica, el sacerdote jesuita estableció que, antes de pensar en supuestas renuncias, los colaboradores del pontífice consideran que es momento de demostrarle su aprecio, solidaridad, unidad y coherencia.
Insistió que las “elucubraciones” sobre el tema corresponden a consideraciones de personas individuales, que no representan el pensamiento de la Iglesia ni de la curia romana.
“El Papa tiene una actitud de firmeza en la prueba, de confianza y de esperanza. Considera que (por el “vatileaks”) existe una imagen falsa de la Santa Sede, exageradamente negativa, que no corresponde a la realidad”, dijo Lombardi.
“Además tiene confianza en sus colaboradores que siente han sido injustamente descritos en un modo negativo, no justo y por lo tanto tiene una palabra de sostén en una prueba que es común, no sólo personal del Papa”, apuntó.
Benedicto XVI ha afrontado, en los últimos días, una de las peores crisis de su ministerio papal por la filtración a la prensa de numerosos documentos confidenciales sobre los temas más delicados que ha debido afrontar desde su llegada al trono de San Pedro en 2005.
El mismo líder católico expresó su tristeza sobre todo por el arresto de su mayordomo personal, Paolo Gabriele, por posesión ilícita de material reservado y como sospechoso de ser uno de los “cuervos”, los responsables del pasaje de informes al exterior de las murallas vaticanas.
Lombardi dedicó gran parte de su encuentro de este día con la prensa a desmentir una serie de informaciones publicadas en las últimas horas por algunos medios de comunicación italianos y atribuidas a fuentes anónimas.
Entre otras cosas el portavoz negó que exista un número determinado de personas que han sido convocadas por la comisión de cardenales creada ad hoc para investigar las filtraciones y puso en duda la posibilidad que otros purpurados hayan sido interrogados.
Negó que, durante las pesquisas, hayan sido interceptadas algunas conversaciones telefónicas de empleados vaticanos y también desmintió que en la casa del mayordomo hayan sido encontrados sobres con las direcciones de los destinatarios de documentos secretos.
Asimismo insistió que existe un gran aprecio universal a la figura del Papa por su superioridad, desde el punto de vista moral y espiritual, también en situaciones como la del “vatileaks”.
“Muchos de los que se han movido con agresividad contra la Iglesia y El Vaticano, generalmente no han involucrado el Papa como persona en su crítica, es demasiado evidente que él está por encima”, apuntó.