El presidente de Francia, François Hollande, descartó hoy participar en cualquier proceso de negociación entre las autoridades colombianas y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El jefe del Ejecutivo francés respondió así al exhorto que las FARC le enviaron a través del corresponsal Roméo Langlois, quien llegó esta mañana a París después de haber sido liberado -el pasado miércoles- por los guerrilleros colombianos, tras 33 días de cautiverio.
Langlois, corresponsal de la cadena de televisión France 24, fue recibido por su padres en el aeropuerto parisino Roissy-Charles de Gaulle, donde declaró a la prensa haber sido bien tratado, “era un rehén VIP, quizá exagero, pero no tengo de qué quejarme”, explicó.
El periodista, acompañado por sus padres, se dirigió en seguida hacia el Palacio del Elíseo, donde fue recibido por Hollande, quien tras el encuentro declaró a la prensa que la liberación de Langlois no fue negociada con las FARC, “no hubo ninguna transacción”, apuntó.
El presidente francés también confirmó haber recibido, de manos de Langlois, una carta de las FARC en la cual, dijo, “explican el significado de su acción y presentan sus disculpas (…) a Francia por este rapto”.
Sin detallar el contenido de la misiva, el reportero había revelado la víspera que contenía un llamado de las FARC a “países amigos” a ayudar a buscar una “salida negociada” al conflicto colombiano, de acuerdo con reportes del diario Le Figaro.
“Esta es la primera vez que presentan sus excusas y es muy importante que se diga a la prensa no son un enemigo”, comentó Langlois.
Sin embargo, Hollande se negó este viernes a adoptar una postura sobre el conflicto entre los guerrilleros y las autoridades colombianas.
“Nosotros, Francia, no podemos comprometernos en ningún proceso. Esperamos que se alcance una solución política y no hay nada más qué decir”, aseveró el mandatario.
“Más allá de Roméo, que hoy puede conocer una nueva vida, tenemos que aprender todas las lecciones de lo ocurrido, quiero decir a todas las familias de los franceses que son rehenes, que no deben perder las esperanzas”, añadió.