WASHINGTON El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo hoy que la economía del país enfrenta “graves turbulencias” y reiteró su presión al Congreso para que “se ponga a trabajar” para impedir más despidos.
“Al igual que en esta época el año pasado, nuestra economía enfrenta graves turbulencias”, sostuvo el mandatario en su mensaje sabatino.
Señaló que “los precios de la gasolina están comenzando a bajar nuevamente, pero cuando subieron durante los últimos meses, eso afectó seriamente el bolsillo de la gente”.
“La crisis en la economía de Europa ha proyectado una sombra sobre la nuestra. Y todo ésto hace que sea aún más difícil recuperarnos completamente y establecer las bases para una economía construida para que perdure”, puntualizó el mandatario estadunidense.
El Departamento del Trabajo indicó esta semana que la tasa de desempleo durante mayo se incrementó de manera mínima, al colocarse en 8.2 por ciento respecto del 8.1 por ciento de abril, tras la adición de apenas 69 mil nuevos empleos, el más bajo de este año.
Obama, quien busca la reelección en los comicios de noviembre próximo, busca evitar que su rival republicano Mitt Romney y la oposición republicana del Congreso utilicen la frágil situación de la economía para criticar sus políticas.
“De sobra se sabe, y yo más que nadie lo sé, que este es año de elecciones. Sin embargo, tenemos responsabilidades que son mayores que las elecciones”, manifestó.
“Ahora no es el momento de que el Congreso esté con los brazos cruzados”, sostuvo el mandatario, quien urgió a los legisladores a que “se pongan a trabajar” para aprobar proyectos de ley y ayudar a los estados a impedir más despidos.
Señaló que esas medidas permitirían reintegrar a la fuerza laboral a miles de maestros, bomberos y policías, así como a trabajadores de la construcción mediante la asignación de fondos para reconstruir carreteras y puentes.
Por su parte, en el mensaje semanal de los republicanos, el senador John Cornyn advirtió sobre un “taxmageddon”, como se refirió a un posible incremento de impuestos a partir de 2013 por la falta de acción de Obama y del Congreso.
“No se equivoquen: todos los trabajadores estadunidenses verán un incremento de sus impuestos a partir del 1 de enero por falta de acción”, advirtió.