Londres. Dos iglesia cristianas del este y centro de Nigeria fueron blanco hoy de un atentado suicida y un ataque armado, en forma respectiva, que dejaron al menos cuatros muertos e innumerables heridos, muchos de ellos graves.

 

En el primer incidente, un terrorista suicida se inmoló fuera de una iglesia evangélica de la central ciudad nigeriana de Jos, en momentos en que decenas de personas se congregaban para participar en las celebraciones dominicales.

 

La explosión provocó la muerte de dos fieles y heridas a más de 40 personas, entre ellos varias mujeres y niños, informó un portavoz de la Policía en Jos, según un reporte de la edición electrónica del diario nigeriano The Punch.

 

En tanto en la oriental ciudad de Biu, en el estado de Borno, un grupo de hombre armados irrumpió en un templo cristiano y abrió fuego contra decenas de files que se encontraban en el lugar, matando al menos a una mujer e hiriendo a un sinnúmero más.

 

El comisionado de policía, Dipo Ayeni, confirmó que el ataque se registró en el templo Cristo Elegido de Dios en Biu, sin que se conozca por ahora la cifra exacta de víctimas.

 

“Tres pistoleros llegaron a las instalaciones de la iglesia y comenzaron a disparar a la gente. Muchas personas fueron muertas y muchas resultaron heridas”, comentó Hamidu Wakawa, un cristiano que se encontraba fuera del templo.

 

El policía comentó que por ahora nadie se ha responsabilizado de los ataques, aunque dijo que sin duda lleva el sello de Boko Haram, un grupo armado que pretende imponer la ley islámica en Nigeria.

 

El grupo, cuyo nombre significa “No a la educación occidental”, ha llevado a cabo numerosas acciones en el norte de Nigeria desde su creación en 2009, las cuales han causado la muerte de cientos de personas, muchas de ellas mujeres y niños.

 

Boko Haram ha dirigido sus ataques contra escuelas, comisarías, edificios de gobierno e iglesia cristina, principalmente en Jos, una ciudad marcada por las divisiones entre el cristianismo y el islamismo.

 

Miles de personas han muerto en los alrededores de la ciudad durante la última década en disturbios, conflictos a menudo desatados por las disputas políticas, económicas y las diferencias religiosas.

 

Loa ataques de este día se registran justo una semana después de que 12 personas perdieron la vida en un atentado suicida contra una iglesia en la ciudad de Bauchi, centro de Nigeria.