ESTAMBUL. Al menos ocho soldados turcos y dieciocho guerrilleros del ilegal Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) murieron en combates en la provincia de Hakkari, en el extremo sureste de Turquía.
Los guerrilleros se infiltraron durante la madrugada desde Irak en el municipio fronterizo de Daglica y atacaron a los soldados turcos sobre las 2:00 de la mañana (hora local) en tres puntos diferentes, según informó el diario turco Hürriyet en su edición digital.
El gobernador de Hakkari, Orhan Alimoglu, había confirmado previamente la cifra de ocho muertos y dieciséis heridos por el lado del Ejército, así como el fallecimiento de 10 “terroristas”, indicó “Hürriyet”, que añadió que los combates siguen activos en la zona.
Otros ocho guerrilleros murieron a lo largo del día en una gran operación militar en la que 4 mil soldados, apoyados por helicópteros, llegaron a rodear a 300 miembros del PKK, de acuerdo con el rotativo.
El jefe del Estado Mayor de Turquía, general Necdet Özel, se trasladó a la zona para dirigir los combates, señaló la cadena de televisión CNNTürk.
El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, comentó desde Los Cabos, donde participa en la cumbre del G20, que nunca negociará con “terroristas” y que éstos únicamente deben abandonar las armas.
Los montes de Daglica, que alcanzan hasta los 3 mil metros de altura, ya fueron escenario de intensos combates en 2007 y 2010.
La provincia de Hakkari, poblada casi íntegramente por kurdos, es de las más afectadas por la lucha entre el PKK y las fuerzas del Estado turco.
El PKK tomó las armas en 1984 para luchar por la autodeterminación de los aproximadamente 12 millones de kurdos en Turquía y, desde entonces, más de 45 mil personas han muerto en enfrentamientos y atentados.