El incremento de cesáreas tiene alarmada a la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya que en 69 países del mundo las tasas están por arriba del 15% recomendado. México no es la excepción: en el sector público 45% de los nacimientos son por esta vía, pero en los hospitales privados se incrementa hasta 68%.
Esto, a pesar de que desde 1995 está vigente en México la Norma Oficial Mexicana (NOM) 007-SSA-1993, que limita las cirugías al 15% de los nacimientos en los hospitales del país.
La mayor parte de las cesáreas se realiza por recomendación del médico, quien prefiere evitar complicaciones durante el procedimientos y enfrentar una demanda por mala práctica, pero también porque así lo decide la futura madre. “Hay una epidemia en la región de Latinoamérica, y en muchos casos son las mujeres quienes la piden”, subrayó Virginia Camacho, consejera del Fondo de Población de las Naciones Unidas.
Para Luis Simon, jefe de Servicios de Ginecología y Obstetricia de Médica Sur, son tres las principales causas del incremento en el número de cesáreas: El temor al dolor del parto vaginal, la facilidad de fijar una fecha para el parto y la edad avanzada de la mujer.
En el caso de los seguros médicos que ofrecen atención en centros hospitalarios privados, Guillermo Barraza, director del área de Salud de Seguros Axa, explicó que las pólizas incluyen cualquiera de las dos formas de nacimiento, aunque sólo 6% de la población está asegurada.
La operación que se hizo “necesárea”
Esta cirugía se perfeccionó en los años 60 para salvar la vida de la madre y el bebé antes o durante el parto. Sin embargo, alcanzó su auge a partir de 1980, cuando los nacimientos por esta vía comenzaron a dispararse. Actualmente, 80% de los nacimientos en países de ingreso medio y alto son por cesárea, según datos de la OMS.
Virginia Camacho recordó que esta operación sirve para salvar a vida de la madre o el bebé cuando hay complicaciones en la última etapa de la gestación o durante el parto.
Las más comunes son la presión alta en la madre, problemas de obstrucción de paso del producto o alteraciones fisiológicas en el trabajo de parto; que el producto esté mal acomodado, sea muy grande o cuando se trata de un embarazo múltiple..
Sin embargo, los especialistas coinciden en que si no existe alguna de estas condiciones el parto debería ser natural pues la cesárea también presenta complicaciones.
“La cesárea tiene riesgos anestésicos, complicaciones operatorias y post operatorias que ponen en peligro la vida de la madre”, señaló Camacho.
Mencionó que existe una corriente a nivel mundial que frente a la elevada incidencia de la cesárea promueve “el parto humanizado”, una práctica en la cual la madre y el bebé son los protagonistas del alumbramiento. Aquí la mujer decide cómo desea dar a luz y si usará algún medicamento o anestesia.
Esta forma de parto vaginal respeta todas las horas de labor de parto que se requiera, sin inducirlo, como se hace en muchos casos. Además de que recomienda la posición vertical para el alumbramiento, pues considera que la cama de parto es el mayor enemigo para que se produzca el nacimiento de manera natural.
Y es que de acuerdo con un reporte de la OMS, los bebés prematuros que nacen por cesárea tienen más posibilidades de morir en el primer año de vida y presentan 30% más complicaciones respiratorias que si nacen por vía vaginal.
Además, reducir estas cirugías representaría un ahorro de dos mil 300 millones de dólares en todos los países con tasas por arriba de la recomendación, de acuerdo con un estudio del Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria de Buenos Aires, en Argentina.
Hospitales privados, sin respuesta
Consultados sobre la alta incidencia de operaciones de cesárea en centros hospitalarios particulares, la Asociación Nacional de Hospitales Privados, el Hospital Ángeles del Pedregal y el ABC no respondieron a la solicitud de información formulada por este diario.
En el caso del hospital Médica Sur, Luis Simon, jefe de Servicios de Ginecología y Obstetricia, respondió que existen comités éticos que evalúan cada cesárea que se realiza en ese nosocomio y qué tan necesaria era. Al mismo tiempo, para reducir estA incidencia trabajan en la reeducación del médico y la madre para conocer los pros y contras de las dos formas de parto.
“Hay folletos informativos y hay cursos que se dan a las mujeres embarazadas, donde se les dicen las ventajas de uno y otro, a fin de tener una población más informada”, dijo.
Aunque no precisó la tasa de cesáreas en ese hospital, señaló que desde hace varios años no se registra ninguna muerta materna.
DATOS
45% de los nacimientos en hospitales públicos se da por cesáreas
68% en hospitales privados
15% es la tasa máxima establecida en la NOM emitida por la Secretaría de Salud
80% es la tasa reportada en países de ingresos medio y alto
FUENTE: OMS Y SSA