La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) sostuvo que las dificultades en la zona del euro han conducido a una mayor incertidumbre y volatilidad financiera, así como a un deterioro en las expectativas de crecimiento de la economía mundial.

 

De acuerdo con la Minuta de la reunión de la Junta de Gobierno, con motivo de la decisión de política monetaria anunciada el 8 de junio pasado, la mayoría de los miembros coincidió en que dicho entorno ha implicado un deterioro del balance de riesgos para el crecimiento de México, aunque un integrante consideró que dicho balance ha mejorado.

 

Todos los miembros argumentaron que la economía mexicana se ha mostrado resistente ante este entorno, y en cuanto al balance de riesgos para la inflación, la mayoría afirmó que se mantiene sin cambios, mientras que otros consideraron que ha empeorado.

 

De acuerdo con el documento, la mayoría de los miembros indicó que la probabilidad de que Grecia abandone la unión monetaria ha aumentado y algunos enfatizaron que la incertidumbre asociada a este evento podría estarse exacerbando por la posibilidad de que se dé un rechazo a las medidas de austeridad acordadas con las autoridades europeas y el Fondo Monetario Internacional.

 

Asimismo, algunos integrantes recalcaron que existiría en ese caso la posibilidad de que la salida de Grecia de la unión monetaria afecte la estabilidad financiera de la zona y del resto del mundo, dadas las posibilidades de un contagio, por lo que concluyeron que la probabilidad de un evento catastrófico ha aumentado.

 

En cuanto a Estados Unidos, la mayoría de los miembros de la Junta concordó en que la economía de ese país continúa mostrando una expansión. Un miembro enfatizó el desempeño que, en este sentido, han presentado el consumo y la inversión del sector privado.

 

Respecto a la evolución de la economía mexicana, todos los miembros aseveraron que su desempeño se ha visto favorecido principalmente por el dinamismo de las exportaciones manufactureras, a lo que algunos añadieron que tanto las exportaciones dirigidas a Estados Unidos, como al resto del mundo, han incrementado su ritmo de expansión.

 

Éstos últimos agregaron que el sector servicios también ha mantenido su ritmo de crecimiento. Asimismo, la mayoría de los miembros de la Junta recalcó que tanto el consumo, como la inversión, también han continuado creciendo.

 

Algunos miembros señalaron que el dinamismo del consumo se ha sustentado en la evolución positiva de sus principales determinantes: el crédito, la confianza del consumidor, las remesas familiares y la masa salarial.

 

La Junta de Gobierno consideró que la postura actual de la política monetaria es conducente a alcanzar el objetivo permanente de inflación de 3.0 por ciento, por lo que determinó mantener sin cambio el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día. Hacia adelante, señalaron sus integrantes, la Junta se mantendrá atenta a la evolución de todos los determinantes de la inflación, dado que el comportamiento de estos podría hacer aconsejable ajustar la postura de política monetaria para hacerla más o menos restrictiva dependiendo del escenario que se presente.

 

En cualquiera de los escenarios se procurará en todo momento la convergencia de la inflación a su objetivo permanente de 3.0 por ciento, señala la minuta de la reunión en la que participaron el gobernador del banco central, Agustín Carstens y los subgobernadores Roberto Del Cueto Legaspi, Manuel Ramos Francia, Manuel Sánchez González y José Julián Sidaoui Dib.