Desde el 21 de mayo pasado más de 2.5 millones de estudiantes en Chiapas, Guerrero, Oaxaca y Michoacán se quedaron sin clases debido a las protestas del magisterio en contra de la Evaluación Universal que, al final y previo acuerdo con los gobiernos locales, se suspendió en las últimas tres entidades.
Las movilizaciones que incluyen paros definitivos y escalonados, plantones y marchas locales y en el Distrito Federal, han sido promovidas por las secciones 22 de Oaxaca, la siete de Chiapas, la 18 en Michoacán y la CETEG en Guerrero para exigir a los gobiernos locales la suspensión de la prueba, entre otras demandas.
La sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en Oaxaca fue la primera en iniciar el paro de labores –el 21 de mayo-. Una semana después del día del maestro el gremio envió al gobierno estatal su pliego petitorio que incluyó la demanda de aumento salarial y de plazas, además de la cancelación de la evaluación universal.
Los más de 74 mil maestros disidentes levantaron el plantón 16 días después, una vez que el gobernador oaxaqueño, Gabino Cué Monteagudo, firmó un acuerdo con el dirigente de la sección, Epifanio Paredes, con lo cual el 6 de junio regresaron a clases un millón 380 mil alumnos de más de 12 mil escuelas.
Por su parte, unos cuatro mil integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) se mantuvieron en paro desde el 28 de mayo hasta el miércoles pasado -20 de junio-, lo que dejó sin clases a alumnos de 170 escuelas; la Secretaría de Educación de Guerrero (SEG) indicó que aún no se contabiliza la cantidad de menores que perdieron clases durante 24 días.
Al igual que en Oaxaca, el secretario general de la CETEG, Gonzalo Juárez Ocampo, firmó una minuta junto con el gobernador de la entidad, Ángel Aguirre Rivero, quien se comprometió a cumplir las peticiones de los maestros, además de suspender la Evaluación Universal hasta octubre, cuando se realizará el Segundo Congreso de Educación.
En Chiapas, el paro de los docentes sólo duró del 4 al 8 de junio, lo que afectó a más de 600 mil estudiantes de e unas cinco mil escuelas de educación básica.
Hace dos días, el miércoles 20 de junio, el gobierno de Michoacán y la sección 18 de la CNTE acordaron de palabra suspender la Evaluación Universal hasta octubre. Hasta la tarde de ayer no se había firmado la minuta respectiva, por lo que continuaron las movilizaciones de los docentes.
El dirigente de la sección 18 de la CNTE, Jorge Cázares Torres, indicó ayer que no se había reanudado la mesa de diálogo, sin embargó previó que hoy a más tardar se reúnan con un representante del gobernador Fausto Vallejo Figueroa, para la firma de la minuta. Con lo anterior se espera que a partir del lunes alrededor de un millón de alumnos regresen al 80% de las escuelas de la entidad que estuvieron en paro.
El domingo próximo, 540 mil maestros inaugurarán el Programa de Evaluación Universal Docente, que se presentará por primera vez. Los profesores de primaria que no están inscritos en el Programa de carrera magisterial realizarán su examen el próximo 6 de julio.
De acuerdo con la Secretaría de Educación Pública (SEP) esta prueba forma parte de la Alianza por la Calidad de la Educación. El programa incluye también la evaluación del aprovechamiento escolar, con ENLACE, y la preparación profesional.