El grupo que detonó un artefacto explosivo el martes pasado en una sede de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) también pretendía atacar las oficinas del instituto Federal Electoral (IFE) y del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la delegación Coyoacán.
Así lo confirmó la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), al dar a conocer que procederá penalmente en contra de dos involucrados, un mexicano y una mujer de nacionalidad australiana, ambos simpatizantes del llamado “Movimiento Anarquista”.
Se trata de Marco Antonio López Hernández , quien sigue hospitalizado luego de que accidentalmente detonó uno de sus artefactos, así como la australiana Felicity Ann Ryder, quien se encuentra prófuga.
En sus declaraciones, López Hernández explicó que fabricó los tres artefactos explosivos con información obtenida de Internet, y adquirió material en tianguis, mercados y tiendas de autoservicio del Distrito Federal y Estado México.
Utilizando relojes de cuarzo, programo las detonaciones, las cuales debían ocurrir entre la noche del 26 de junio y la madrugada del 267 de junio.
En la planeación y operación del ataque contó con el apoyo de Ann Ryder, originaria de Albury, Australia, quien había ingresado a la Ciudad de México desde el 6 de diciembre del 2011, utilizando un pasaporte de turista. Ambos responsables se conocieron a través de una página de internet de movimientos anárquicos.
Poco antes de la media noche del martes lograron detonar uno de los artefactos en las oficinas de la CFE localizadas en la carretera Panorámica Picacho Ajusco 201, esquina con Cardos, colonia Miguel Hidalgo, Tercera Sección, delegación Tlalpan. El saldo fue de daños materiales.
Luego, según lo declarado por el detenido, se dirigieron a la delegación Coyoacán para dejar los otros dos artefactos en oficinas del IFE y del PRD, sin embargo, en calles de la colonia Parque del Carmen, un mal manejo de uno de los artefactos provocó que este detonara.
Cuando los policías llegaron al sitio encontraron a López Hernández con quemaduras de consideración en la pierna derecho, lo que ameritó su traslado al Hospital Rubén Leñero.
En la mochila del joven se encontró el tercer artefacto explosivo, además de diversas prendas de ropa y otros documentos, entre ellos la visa y pasaporte de la joven australiana que fungió como su cómplice.
Con las declaraciones y elementos periciales reunidos, la PGJDF resolvió proceder penalmente en contra de los involucrados por los delitos de Ataques a la Paz Pública en ambos casos y Daño a la Propiedad en el caso de la detonación en CFE.
En cuanto López Hernández sea dado de alto, será trasladado ante un juez penal del Reclusorio Sur, mientras que en el caso de Ann Ryder se solicitará la orden de aprehensión correspondiente para comenzar con su localización.